Detalles de la que sería una presunta red criminal que se encuentra de la cárcel La Picota, en Bogotá, fueron los que dio a conocer un guardián del Inpec, que se convirtió en testigo clave de la Fiscalía. Resultando en la reciente captura de 12 personas, entre funcionarios del Inpec y sus esposas.
El tráfico de drogas y licor, traslados de cárcel y hasta la venta de fueros sindicales fueron dados a conocer tras la declaración del funcionario.
Según la revelación conocida por la Revista SEMANA, los funcionarios manejaban el tráfico de drogas, controlaban la entrada de licor, cobraban por los traslados y llegaron al punto de ubicar dos casas detrás de la cárcel para almacenar los estupefacientes.
Ahora la Fiscalía cuenta con una lista de funcionarios del Inpec que están vinculados a una descarada corrupción que ya se ha convertido en una supuesta red criminal que tiene cabecillas y roles definidos.
El guardián entregó detalles, nombres y momentos claves. Según su testimonio, los funcionarios de custodia en la cárcel, algunos activos y en la misma cárcel, se apoderaron del tráfico de drogas y fue así como decidieron montar su propia ‘olla’ de estupefacientes.
En ese punto, el testigo dio a conocer la ubicación de dos casas que se convirtieron en la bodega de las drogas y el licor.
“Exactamente por el lindero conocido como La Guayana, que colinda con la reja y el muro que divide el centro penitenciario, dos viviendas se utilizan para guardar sustancias estupefacientes y licor que posteriormente ingresan al penal en la madrugada. La droga ingresa en bolas compactas que tiran hacia el penal para que el personal de guardia la recoja”, indicó el testigo.
En un documento conocido por SEMANA, y que anticipa un principio de oportunidad, se menciona detalladamente cómo los funcionarios del Inpec ubicaron a sus cómplices en puntos estratégicos de ingreso a la cárcel, para desde allí facilitar el tráfico de sustancias ilícitas, licor, celulares, entre otros elementos.
Del Pabellón de Alta Seguridad (PAS), donde los huéspedes son extraditables, la Fiscalía tiene videos de seguridad. Allí el confeso guardia ha logrado señalar como funciona la red criminal y quiénes son los protagonistas. Al observar el video, el guarda ha demostrado el ingreso de una canastilla color verde, la cual contiene latas con las características similares a la cerveza Budweiser.
Sobre esto hay evidencia, como la captura de dos funcionarios del Inpec por las irregularidades en el traslado de Ramiro Suárez Corzo, exalcalde de Cúcuta.
Ellos fueron judicializados por llevar desde Bogotá hasta Cúcuta en carros particulares, al exmandatario a cambio de un fuerte pago económico.
Todo quedó al descubierto cuando el exalcalde afirmó que pagó por los traslados y por recibir un trato “especial” mientras permanecía en detención domiciliaria y luego en una clínica, que, según algunas denuncias, convirtió en una sede política.
Carrusel de sindicatos
Otra de las revelaciones tiene que ver con que desde algunos sindicatos se ofrece la posibilidad de incluir a funcionarios en un fuero sindical, que les garantice impunidad en los procesos disciplinarios, penales y/o traslados. Todo esto a cambio de pagos millonarios.
En el documento conocido por SEMANA, se menciona que al interior de los centros penitenciarios existe un carrusel de sindicatos, que de forma irregular consigue fueros sindicales, así como personerías jurídicas.
“Los sindicatos son constituidos solo con el fin de obtener beneficios, como fueros sindicales, los cuales se venden a dos millones de pesos, para evitar traslados y para que se les concedan permisos permanentes”, explicó.