La procuradora general de la Nación, Margarita Cabello Blanco, solicitó este jueves, 5 de septiembre, a la Corte Constitucional ampliar la protección laboral para los trabajadores cuya pareja o cónyuge esté embarazada, independientemente de si la mujer tiene un empleo formal o no.
En su concepto, la actual legislación, que limita el fuero de paternidad a los casos en los que la mujer no esté empleada, es desproporcionada y afecta el bienestar familiar.
Cabello señaló que esta norma deja sin amparo a familias donde los ingresos dependen tanto del hombre como de la mujer. En su petición, la Procuradora General hizo énfasis en que condicionar el beneficio del fuero de paternidad al desempleo de la mujer gestante podría comprometer la estabilidad económica de la familia y perjudicar a ambos padres.
La funcionaria destacó que esta protección restringida genera un obstáculo adicional para la mujer, ya que su permanencia en el empleo puede privar a su pareja de la estabilidad laboral garantizada por el fuero de paternidad.
“Condiciona materialmente la vinculación y estabilidad laboral de la mujer gestante, pues su permanencia en el trabajo impide que su pareja se beneficie del fuero de paternidad y, en consecuencia, se garantice cierta estabilidad laboral y económica de la familia”, aseguró Cabello.
Del mismo modo, recordó que en el año 2017, la Corte Constitucional había reconocido la estabilidad reforzada para las parejas de mujeres embarazadas, sin establecer el requisito de que ellas debieran estar desempleadas.
Por esas razones, la Procuradora General pidió declarar inexequible el aparte de la Ley 2141 de 2021 que exige que la mujer no tenga trabajo formal para que pueda operar el fuero de paternidad (art. 1, numeral 5) y, con ello, “se optimice la protección de la familia, los derechos de la mujer gestante y el interés superior de los niños”, declaró.
*Con información de Colprensa.