Tres medidas preventivas o cautelares fueron tomadas por el Ministerio del Trabajo en el caso del cierre de operaciones en la planta de manufactura de General Motors - Colmotores. En una de ellas, la entidad del Gobierno le ordenó a la compañía no despedir aún a ninguno de sus empleados.
“Ordenar a la sociedad General Motors - Colmotores S.A. y a la sociedad Zona Franca Industrial Colmotores Zoficol S.A.S. mantener el vínculo laboral de la totalidad de los y las trabajadoras objeto de la solicitud de autorización para la clausura de labores total y de forma definitiva”, reza la decisión.
De esta manera, el despido colectivo de 728 empleados entre las dos compañías no podrá efectuarse, por lo menos, hasta que el Ministerio no tome una decisión de fondo frente a la solicitud realizada por estas para cesar sus operaciones.
La decisión obedece a la falta de garantía y certezas que hay frente a la condición que enfrentarían los trabajadores involucrados en el trámite, quienes se quedaron sin empleo de manera inmediata, afectando a ese estimado de más de 700 hogares.
“El lunes 29 abril el Ministerio inicio la diligencia administrativa y de acción de inspección presencial hasta el día 30 de abril, proceso que se realizó de manera continua durante 16 horas, en el cual se evidenció que las empresas mencionadas cesaron actividades el pasado 25 de abril, sin previa autorización del Ministerio de Trabajo y clausuraron unilateralmente la planta de trabajo”, explicó la ministra Gloria Inés Ramírez.
La entidad del orden nacional encontró además que las compañías no cumplieron las normas establecidas sobre esperar la autorización del Ministerio para proceder con el despido colectivo de los trabajadores.
Lo anterior sin contar con que no se está permitiendo el acceso a los trabajadores de la sociedad General Motors – Colmotores S.A. a las instalaciones, las cuales tienen en su entrada principal para vehículos y peatones varios maletines viales de color naranja para cercarla en su totalidad.
Como se recordará, la semana pasada General Motors anunció que iba a transformar su modelo de negocio en Colombia, finalizando con la producción que hasta este año se hacía en la planta de Colmotores en Bogotá para pasar a un sistema simple de comercialización en el país, es decir, solo vender sus autos.
Sin embargo, la decisión del Ministerio de Trabajo también arropa esa transformación. La otra medida cautelar tomada es “ordenar a la sociedad General Motors - Colmotores y a la sociedad Zona Franca Industrial Colmotores Zoficol abstenerse de iniciar y/o adelantar cualquier trámite administrativo (...) tendientes a reorganizarse, rediseñarse, disolverse, insolventarse y/o liquidarse, hasta tanto no se adopte una decisión de fondo dentro del expediente”.
La ministra Ramírez no detalló en qué fechas podría tomarse una decisión, por lo que, de momento, los trabajadores de las compañías tendrán que seguir vinculados y devengando sus salarios, independiente de que estas retomen o no la operación.