En medio de las protestas del paro camionero, el presidente, Gustavo Petro, defendió la propuesta de aumentar los precios de los combustibles para evitar un incremento en el costo de la comida y aseguró que la decisión se tomó para cubrir una deuda que viene desde el gobierno de Iván Duque.
Inicialmente, señaló que el Ejecutivo no incrementó el precio del diésel desde el año 2019 “porque se congelaron los precios sin tener en cuenta que estos suben y que Ecopetrol, por ley, usa el precio internacional del petróleo para producir el diésel y la gasolina”.
Sostuvo que el aumento del combustible es para pagar las deudas que “dejó de manera muy irresponsable con Colombia, el expresidente Duque” y que de esta manera se evita que se quiebre Ecopetrol, porque “toco pagarle la deuda a Ecopetrol y no se hará con el dinero que va a los niños hambrientos y sin salud”.
En su mensaje, Petro señaló que “tuvimos la prudencia de solo subir la gasolina para no afectar los precios de la comida que estaban en ascenso y que se transporta sobre todo en camiones”.
El Jefe de Estado criticó a los grandes empresarios del sector camionero, al asegurar que “creyeron que el subsidio era un derecho que el pueblo colombiano debe pagarles. Estas empresas desplazan los costos del diésel a los fletes de carga, cosa que no puede hacer el pequeño camionero al que tienen explotado”, argumentó.