Un lamentable y doloroso hecho atraviesa la familia del bebé de un año y 4 meses de nacido que la mañana de este miércoles 18 de septiembre falleció por inmersión, al caer de manera accidental en un tanque lleno con agua, según manifestaron las autoridades.
El hecho sucedió la mañana de este miércoles en la zona de invasión del barrio 7 de agosto, del municipio de Santo Tomás, Atlántico.
Hasta allí llegaron las autoridades de policía para conocer más detalles del accidente donde murió ahogado el niño Carlos David Ferrero.
Lo que se sabe es que el niño Carlos David estaba a cargo de una mujer, quien manifestó que estaba a su cuidado al tiempo que ella hacía otras labores de la casa. Según ella, detenía un momento lo que estaba haciendo para estar pendiente del infante.
Todo parece indicar que hubo un momento en el que se distrajo y eso lo aprovechó el niño para salirse para el patio de la residencia y, se deduce, que por curiosidad se habría ido de cabeza dentro de un balde de color amarillo, que estaba lleno con agua.
La mujer dijo que cuando se dio cuenta que el menor había desaparecido de su vista empezó a buscarlo dentro de la casa, pero cuando salió al patio se dio cuenta de la lamentable escena.
Lo sacó y luego pidió ayuda a los vecinos, quienes la ayudaron a llevar al infante hasta el Hospital de Santo Tomás, donde los galenos que lo atendieron dijeron que había ingresado sin signos vitales.
Las autoridades no entregaron los nombres de los padres ni qué labores desempeñan, sólo han indicado que el niño Carlos David estaba bajo el cuidado de la mujer, que entregó detalles de lo sucedido. No obstante, se inició un proceso de investigación para esclarecer los hechos.