A través de un comunicado de prensa, la Federación Nacional de Cafeteros, FNC, rechazó las declaraciones de la ministra de Agricultura, Jhenifer Mojica quien señaló que el gremio debe reestructurarse y no seguir gastando los recursos de la contribución cafetera en burocracia costosa.
Ante ello, el Comité Directivo de esa organización manifestó su descontento con lo dicho por la ministra sobre la situación financiera de la federación, “pues además de no ser consecuente con la realidad, viniendo de un ministro de Estado, claramente pone en riesgo el más preciado bien público cafetero que es la garantía de compra”, se lee en el documento.
“La Federación podría ser un gran aliado o lo fue en su época dorada, ayudaba a hacer infraestructura social, soñamos con que la Federación lo logre hacer, pero en la realidad inevitable también es que la Federación Nacional de Cafeteros es dependiente de la administración de fondos de parafiscalidad y esos santos óleos no los puso este Gobierno”, fueron las palabras dichas por Mojica ante la comisión cuarta del Senado.
Los directivos de la Federación aseguraron que las “palabras” de la Jefa de la cartera de Agricultura “tienen implicaciones frente al mercado cafetero, trayendo con ello graves consecuencias para los caficultores, por lo que le pidieron moderar su discurso”.
“El camino de la industrialización del país en materia cafetera tuvo su inicio gracias y a instancias de la Federación Nacional de Cafeteros; no ha habido otra entidad que haya puesto en marcha esa labor y tampoco se puede desconocer hoy ese enorme aporte al desarrollo del país y a la caficultura”, se defendieron los agremiados.
Para la ministra, la FNC no puede resolver los “problemas del café” que incluyen desde la construcción de vías, pasando por la dependencia de los precios internacionales, hasta la descarbonización de la agricultura, que pronto se convertirá en argumento de exportación para los grandes compradores.
“Aquí el que le puso los santos óleos al café han sido todas las políticas hacia atrás”, reiteró Mojica.