Este martes se registró un nuevo atentado al oleoducto Caño Limón Coveñas en inmediaciones de la vereda Llana Baja, en Teorama, Norte de Santander, generando una grave afectación al medio ambiente.
La estatal petrolera Ecopetrol activo el plan de contingencia y le solicitó a la comunidad de la zona abstenerse de encender cocinas, fogatas, cigarrillos o similares cerca al derrame de crudo y rechazó “el nuevo atentado al oleoducto”.
Las autoridades están tratando de esclarecer los hechos para establecer los responsables de un nuevo ataque que afecta la infraestructura del país y afecta el medio ambiente.
ELN, principal sospechoso
Las autoridades consideran que el principal sospechoso de este nuevo atentado es el grupo guerrillero ELN, que en varias ocasiones anteriores ya había atacado esta estructura petrolera.
Además, la hipótesis se fundamenta en una presunta presión de esa organización criminal para reanudar los diálogos de paz, que en estos momentos se encuentran en el limbo tras el retiro de Ecuador como país garante.
Por su parte, el presidente de Colombia, Iván Duque, anunció que dichos diálogos no se reanudarán hasta tanto, el ELN no libere la totalidad de secuestrados que mantienen en su poder.
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