El oficial de Migración Colombia, Didier Orlando Palacios Pinilla, quien prestaba sus servicios en la zona del Tapón del Darién, deberá comparecer ante la justicia luego de que la Procuraduría General de la Nación le formulase un pliego de cargos en su contra por su presunta implicación en casos de “tráfico de migrantes”.
De acuerdo con la investigación adelantada por el órgano interventor, este funcionario, que desempeñaba sus funciones en el puesto de control marítimo del corregimiento de Capurganá, en el municipio de Acandí, Chocó, habría utilizado de manera indebida sellos oficiales y, presuntamente, falsificó documentos con la finalidad de facilitar la entrada de ciudadanos extranjeros al país, y su posterior salida irregular hacia Panamá y Estados Unidos.
“El oficial utilizó su posición y cargo para permitir la salida irregular de personas vulnerables, facilitando así las operaciones de una red trasnacional de tráfico de migrantes, en la cual habría participado”, se explica en el comunicado emitido.
Esta sería la primera vez que la Procuraduría formula cargos disciplinarios por esta categoría de “tráfico” y, de comprobarse lo acusado, esta falta incurriría una violación grave de los derechos humanos.
La conducta fue calificada provisionalmente como gravísima a título de dolo. Ahora, el proceso continuará con su etapa de juzgamiento.
La problemática que representa la crisis migratoria en el país ya había sido advertida por la Procuraduría que, en abril del 2024, solicitó al Gobierno Nacional medidas de choque en respuesta a esta situación.
En aquel entonces, los los ministerios de Relaciones Exteriores, Defensa ,Transporte, Turismo y Ambiente, Migración Colombia y Fuerza Publica, "adoptar las medidas necesarias, de toda índole, para restablecer los derechos de los más de 3 millones de migrantes que se calcula, recorren el territorio nacional, en tránsito a otros países o con interés de permanencia en Colombia."
Asímismo, en la directiva presentada por el procurador delegado para los Derechos Humanos, Javier Sarmiento, hacen un llamado a Migración Colombia para fortalecer el control fronterizo, “a la Fuerza Pública mejorar sus capacidades logísticas en seguridad e interdicción en zonas de frontera, al Ministerio de Industria y Comercio mejorar los controles en el sector turismo y hotelero contra el tráfico de migrantes.” agregó.
Según UNICEF, en los primeros meses del 2024, más de 30.000 niños y niñas migrantes atraviesan la selva del Darién, 2.000 de los cuales lo hicieron separados de sus familias o sin acompañantes.
Una experiencia que, según Luis Pedernera, vicepresidente del Comité Derechos del Niño de la Organización de las Naciones Unidas, "es lo peor que le puede pasar a un niño migrante y a su familia en su experiencia por buscar un futuro mejor”.