Este lunes se dio a conocer una denuncia pública hecha desde la Organización de las Naciones Unidas para salvaguardar la vida del defensor de derechos humanos e integrante del Comité de Integración del Macizo Colombiano - CIMA, Guido Rivera, quien ha comenzado a recibir fuertes amenazas.
“1/ Urgimos a autoridades a tomar todas las medidas para proteger al defensor de #DDHH e integrante del @CIMA_DDHH Guido Rivera, a quien la Oficina de ONU Derechos Humanos conoce desde hace varios años X su labor de defensa de #DDHH”, se leyó en un primer mensaje.
Tras esto, continuó con una serie de publicaciones ahondando en sus peticiones, “2/Condenamos amenazas contra su vida por parte de un grupo armado no estatal en #Cauca. Le reiteramos a estos grupos su obligación de respetar, en todo tiempo y lugar, la vida e integridad de la población civil, y en este caso del defensor de #DDHH Guido Rivera. @petrogustavo”.
Cabe decir que, con las respectivas publicaciones, en las que se le pide expresamente a la Fiscalía de la Nación tomar acción para “investigar, juzgar y sancionar a los responsables de las amenazas contra el defensor, así como tomar las medidas necesarias en materia de protección para las comunidades, sus liderazgos y personas defensoras,” , también se pudo en conocimiento, un comunicado en el que se habla de los continuos asedios que reciben quienes no comulgan con estos grupos armados, y de las víctimas que ha cobrado el recrudecimiento de la violencia.
“Con mucha preocupación asistimos desde 2020, al incremento de degradación de las violencias e imposición autoritaria de “las ideas y proyectos” por medio de las balas, de grupos armados. Sus acciones por disputa de los territorios, no dan cumplimiento al cese de hostilidades contra la Población, ni asumen el Principio de Distinción y la aplicación al Derecho Internacional Humanitario, en los acuerdos de Paz Total”, reza un comunicado titulado ‘El autoritarismo armado agrede las luchas sociales por la vida y la construcción de Paz Justa en el Cauca y el Suroccidente Colombiano’.
En dicho documento, se exponen algunos de los crímenes que ha dejado la cruenta guerra entre diferentes grupos criminales que delinquen en la zona. “Son múltiples los hechos sanguinarios en zonas con clara influencia de estos grupos armados, en especial del Comando Coordinador de Occidente -CCO- y sus estructuras, hechos como: La operación que denominaron “recuperación del Cañón de Micay (Tambo-Argelia), más una ola de amenazas, asesinatos, desplazamientos y persecución que sobrevinieron desde febrero de 2020, situación denunciada a nivel nacional e internacional. El asesinato sistemático de guardias, autoridades, sabedores y sabedoras tradicionales de los pueblos indígenas en occidente, norte, centro y oriente del Cauca, que arroja un significativo número de víctimas -lo que ya se puede calificar como etnocidio-.”
Y añadió, “La legada, e intento de copamiento militar del Macizo en La Herradura (Almaguer) en agosto de 2022, donde señalan al Comité de Integración del Macizo Colombiano -CIMA-, organización social campesina, diciendo que “todo lo que sea CIMA se debe ir del territorio”, en enero de 2023 es asesinada EDILSAN ANDRADE, lideresa del CIMA y Guardia Maciceña en Lomabajo (Rosas), con la información impartida desde el COO a sus combatientes es que el CIMA es una organización armada. El asesinato de los Docentes JAIRO TOMBÉ y su esposa ELEONORA GONZALEZ en El Hoyo (Patía) en junio de 2023, expresa la barbarie y desconocimiento de ideales políticos”.
La creciente preocupación, se da en un momento de fuerte tensiones y hostigamientos hacia las fuerzas militares de Colombia, quienes también han visto cómo los alzados en armas, quieren tomar el control de diferentes territorios.