La patrullera de la Policía Danna Canizalez pidió perdón este miércoles, 11 de septiembre, en medio de la audiencia por las interceptaciones ilegales de las comunicaciones a dos exempleadas de la exjefe de gabinete de la Presidencia de la República y hoy directora de Prosperidad Social, Laura Sarabia.

“Como humanos cometemos errores y no somos perfectos y en mi caso no fue la excepción, en mi condición al momento de los hechos como patrullera de la Policía Nacional, perteneciente a la Sijín de Bogotá, con una antigüedad en la institución de dos años, situación que por falta de experiencia, por creer, confiar y recibir órdenes de mis superiores, todo me llevó a querer hacer un trabajo de manera honesta y correcta para la comunidad”, dijo la uniformada.

Varios integrantes de la Policía Nacional, en ejercicio de sus cargos, estuvieron involucrados en las interceptaciones ilegales de las comunicaciones de dos exempleadas de Sarabia. | Foto: SEMANA

“Quiero pedir disculpas por mi error a las víctimas, la señora Marelbys Meza, Luz Robles, Fabiola Perea, el señor Johnson Pineda, a los fiscales, la doctora Marbel Morales y el doctor Óscar Zapata y a sus familias, por fallar a la comunidad en general y a mi familia, situación de la que estoy totalmente arrepentida y de que ahora en adelante tengo muy claro que no se volverá a repetir”, agregó.

Y finalizó: “Al perder mi libertad causé mucho daño en mi familia y pase por situaciones muy difíciles, por eso ruego a ustedes que de todo corazón me disculpen por mi error, por el daño, dificultades causadas a ustedes como víctimas y a sus familias, el cual nunca quise ocasionar, espero entiendan los motivos que me llevaron a esta situación”.

Según la investigación realizada por una fiscal de la Dirección Especializada contra la Corrupción, se estableció que varios integrantes de la Policía Nacional, en ejercicio de sus cargos, estuvieron involucrados en las interceptaciones ilegales de las comunicaciones de dos exempleadas de Sarabia.

Para realizar estas “chuzadas”, se conoció que habrían utilizado información falsa para solicitar a un fiscal de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales, con sede en Quibdó (Chocó), aval para intervenir dos líneas telefónicas que serían de alias La Madrina y alias La Cocinera, dos señaladas colaboradoras del ‘Clan del Golfo’.