“Se declara la calamidad pública para el municipio de Rosas, a raíz de la sucesiva realización de eventos naturales que afectan la infraestructura vial, los colegios, los acueductos y las viviendas. Seguimos evacuando personas en el tema de prever la pérdida de vidas humanas”.
Con estas palabras, el alcalde del municipio de Rosas, Cauca, Marco Antonio Rojas, declaró este miércoles 10 de enero la calamidad pública ante los deslizamiento de tierra de grandes proporciones que se han registrado en esa localidad durante los últimos días.
“Como #GobiernoDeLPueblo nos reunimos con elServicio Geológico Colombiano, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, UNGRD; la Oficina de Gestión del Riesgo de Desastres - Cauca y el #ConsejoMucipal, con el fin de socializar e identificar los puntos de riesgo de movimiento en masa, y así mismo, tomar las acciones necesarias”, se anunció antes en la cuenta de la Alcaldía de Rosas en la red social X.
Esto después del movimiento de masas que se viene presentando desde el pasado 6 de enero alrededor de la falla geológica localizada en la vereda Portachuelo, que continúa con una alta actividad, según han explicado los organismos de socorro que han visitado esa región caucana.
De acuerdo con una información publicada por Blu Radio, el hundimiento de la Vía Panamericana y las grandes grietas sobre las montañas se han convertido en una amenaza latente para decenas de familias ubicadas en esa zona rural de Rosa, por lo que ya se inició la evacuación de las personas que habitan el sector hacia zonas seguras establecidas por la Alcaldía.
Precisamente, según la misma fuente, Rojas, mandatario de la localidad, demandó ayuda urgente de parte del Gobierno Nacional en lo que respecta a la atención que requieren las personas damnificadas por la emergencia.
De igual forma, solicitó apoyo logístico para mitigar los daños sobre la importante Carretera Panamericana, que comunica a los departamentos de Cauca y Nariño con el Valle del Cauca y el resto del país.
Justamente por ello, varios gremios empresariales y de transportadores expresaron su preocupación ante la posibilidad de que esa región del territorio nacional quede nuevamente incomunicada, como ocurrió hace un año, cuando otro deslizamiento de tierra destruyó totalmente la vía en la vereda Chontaduro, también perteneciente a Rosas.
“Ese cierre que dejó incomunicado al suroccidente colombiano causó graves pérdidas para el sector productivo del departamento, superando los $ 80.000 millones”, afirmó Gerardo Arroyo, presidente del Consejo Gremial y Empresarial del Cauca, citado por Blu Radio.