Durante una ceremonia de ascensos en la Escuela Militar José María Córdova, el presidente Gustavo Petro confirmó que las Fuerzas Militares llevaron a cabo un bombardeo contra el Clan del Golfo en una operación conjunta entre los departamentos de Córdoba y Antioquia. Según el mandatario, este ataque marcó el inicio de una ofensiva en la que varios miembros de esta organización criminal perdieron la vida.
“Fue el inicio de la operación, hay varios muertos del Clan del Golfo. La operación aún no termina. Parece que, en su estilo delictivo, recibieron la indicación de sus jefes de cambiarse, de ponerse de civil y salir de la zona, pensamos que habría 100 concentrados″, afirmó el mandatario de los colombianos.
Tras el bombardeo, se reportó que gran parte de los integrantes de la organización ilegal huyeron. El presidente destacó que el ataque dejó a este grupo debilitado. “Estos hombres eran básicamente incapaces de sostener un enfrentamiento militar. Quedaron disueltos, y espero que así sea de manera permanente”, afirmó.
Giro a la política de seguridad
Este es el segundo bombardeo autorizado por el jefe de Estado desde que asumió el cargo. El primero tuvo lugar el 24 de julio en el Cañón del Micay contra un campamento de las disidencias lideradas por Iván Mordisco.
Cabe recordar que una de las primeras medidas del presidente Petro fue restringir los bombardeos, priorizando la protección de los menores de edad que pudieran estar en campamentos ilegales. Sin embargo, esta política se modificó para permitir ataques siempre y cuando se garantice que no haya presencia de niños en las áreas objetivo.
En el mismo evento, el mandatario lamentó la muerte del capitán Hugo Moncada, el sargento David Buitrago y los soldados profesionales Jhon Mamiam e Ipia Barrera, quienes fallecieron en el municipio de Cáceres, Antioquia, durante una operación helicoportada.
Según las investigaciones preliminares, los militares habrían cortado las sogas antes de tocar el suelo, sin percatarse de que debajo de ellos había un barranco, teniendo un desenlace fatal para los militares.
El mandatario extendió las condolencias a las familias de los uniformados que perdieron su vida en esta misión y que recibirán los honores respectivos por las Fuerzas Armadas.
Concluyó reiterando el compromiso del Gobierno con la lucha contra los grupos armados organizados en todo el país y dijo que con esta operación, el Gobierno busca enviar un mensaje contundente para la desarticulación de estructuras ilegales como el Clan del Golfo, que siguen delinquiendo y han hecho de la minería ilegal del oro una de las mayores fuentes de financiación.