El Mandatario afirmó que la medida entra a regir desde el mes de octubre. Se citará al Consejo Nacional de Estupefacientes para buscar alternativas.
El presidente Juan Manuel Santos anunció en la mañana de este sábado que desde el próximo primero de octubre se suspenderán en el país las fumigaciones con glifosato, y anunció que se buscará otro mecanismo para seguir erradicando los cultivos ilícitos.
El anuncio lo hizo en la mañana de este sábado el presidente Juan Manuel Santos desde el Hospital de Kennedy, en Bogotá, donde también expresó que la decisión sobre el glifosato se toma como el resultado de las investigaciones realizadas por la Organización Mundial de la Salud, entre otros, que recomendaron no seguir usando ese químico por sus resultados adversos para la salud humana.
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Santos además dijo que esta decisión se toma también virtud de lo que falló la Corte Constitucional que acogiendo el llamado principio de precaución pidió suspender ese tipo de fumigaciones. Esos estudios concluyeron que sí existe riesgo para la salud y es una evidencia suficiente para aplicar lo que la Corte llama como principio de precaución, señaló el Presidente tras asegurar que les pedirá a los ministros que tienen asiento en el Consejo Nacional de Estupefacientes que pidan terminar con las aspersiones con glifosato. Explicó además que se establecerá con el Ministerio de la Defensa y las autoridades encargadas de la lucha contra el narcotráfico un mecanismo alterno para reemplazar al glifosato, por lo que dio un periodo de transición, el cual irá máximo hasta el primero de octubre. Santos indicó que muy seguramente se intensificarán las erradicaciones manuales, que hacen parte de los instrumentos que se tienen para combatir la cadena de lucha contra el narcotráfico. Insistió en que no se puede entender esta medida como una forma de debilitamiento contra esa lucha, y manifestó que tanto la Policía, el ministerio de la Defensa y la Fiscalía intensifiquen sus acciones en contra de los narcotraficantes.
Para Daniel Mejía, director del Centro de Estudios sobre Seguridad y Drogas de la bogotana Universidad de los Andes, esa baja efectividad también reside en que los cultivadores están dispuestos a volver a sembrar rápidamente.
"Si el avión pasa y efectivamente destruye el cultivo, los cultivadores de coca tienen semilleros listos para resembrar", dijo el experto.
Así, Mejía, quien ha liderado estudios sobre la política antidrogas en Colombia, aseguró que la efectividad del pesticida es de 3,5%, lo que "significa que eliminar una hectárea (de coca) con glifosato le cuesta a Estados Unidos y a Colombia 72.000 dólares". "Este es un costo bastante alto", señaló.
Según el experto, los estudios en Colombia han mostrado que las aspersiones con glifosato tienen efectos negativos dermatológicos, respiratorios y reproductivos, al provocar pérdida de embarazos.
Entre 2000 y 2007, Colombia aplicó un fuerte programa de erradicación de cultivos ilegales en la frontera con Ecuador, en el marco de un millonario plan antidroga financiado por Estados Unidos, que fue denunciado por Quito y que llevó a la suspensión de la aspersión aérea en las cercanías de la zona limítrofe hace un par de años.