En el aeropuerto internacional Ernesto Cortissoz de Barranquilla, se desató una jornada de protestas el pasado domingo debido a la molestia de un grupo de viajeros que quedaron varados en la terminal.
La situación se originó por la cancelación de un vuelo con destino a San Andrés por parte de la aerolínea Wingo, que afectó a más de 200 pasajeros.
Este vuelo tenía programadas las rutas Barranquilla - San Andrés, San Andrés - Barranquilla y Barranquilla - Bogotá para la jornada del domingo. Sin embargo, el primer vuelo que debía partir desde Barranquilla alrededor de las 6:00 a.m. fue cancelado sin proporcionar una explicación a los pasajeros afectados.
Uno de los pasajeros se pronunció al respecto y señaló: “muy mal, muy mal, absolutamente nada. Estamos a la deriva”, al mismo tiempo que se unió a las quejas de los pasajeros que completaron hasta ocho horas de espera por la salida del vuelo.
“Entonces dejan a la gente en la incertidumbre y hay que esperar, hay que esperar, hay que esperar. Solo hay un avión para cubrir tres rutas, pero yo me pregunto ¿qué hacen vendiendo tiquetes?”, aseguró a Blu Radio Eduardo Sossa, quien debía llegar a Bogotá en la tarde del domingo.
Frente a este escenario, los pasajeros afectados decidieron expresar su descontento en la sala de embarque, exigiendo una solución a la situación. Una de las viajeras manifestó su insatisfacción, señalando que hasta el momento no habían cumplido con ninguna de las promesas hechas, ni siquiera en lo que respecta a la comida. Además, expresó preocupación por la falta de consideración hacia los niños presentes en la situación.
Margarita Reyes y Julio Sánchez Cóccaro afectados por la cancelación del vuelo
Este incidente salió a la luz pública gracias a las publicaciones en redes sociales de los actores Margarita Reyes y Julio Sánchez Cóccaro, quienes compartieron historias denunciando la situación, así como las dificultades que enfrentaban algunos pasajeros que viajaban con bebés a los destinos mencionados.
En la primera publicación, Julio Sánchez relató que tenía un vuelo programado desde Barranquilla hacia Bogotá con un horario de partida previsto para las 12:45 p. m. A pesar de que la aerolínea le informó que la espera sería breve, otros pasajeros con destino a San Andrés ya habían estado esperando por más de siete horas. Además, destacó que una de las opciones ofrecidas por el personal del aeropuerto era llamar a la aerolínea, pero esto implicaba un costo adicional.
“Wingo no nos soluciona nada, sencillamente llamen al call center, cuando uno llama al call center resulta que usted tiene que poner el número de su pasaje y le cobran por eso, solo por la consulta, entonces queremos que nos solucionen señores de Wingo”, afirmó Julio Sánchez Cóccaro.
Después de esperar durante una hora, el actor expresó su frustración en sus redes sociales, compartiendo nuevas historias en las que mostraba su evidente enojo. En sus publicaciones, señaló que era altamente probable que no pudiera regresar a Bogotá debido a la situación.
“A ustedes les están solucionando o no, les están solucionando o no. Wingo abajo”: son parte de las palabras de Julio Sánchez, que además preguntó a algunos de los afectados por su situación. Algunos de ellos resaltaron que se encontraban en el aeropuerto desde las 6:30 a. m.
“Nada de lo que han dicho nos han cumplido, ni siquiera el almuerzo, los niños están aquí y no nos han respetado para nada, hace más de una hora y media pidieron el tiempo para el almuerzo para darnos el reporte de mantenimiento, ahí no han solucionado nada. Respeto porque todos los que estamos aquí tenemos nuestro tiempo y es una falta de respeto que solo tres personas estén atendiendo”, son las palabras de una de las afectadas.
Horas más tarde, se conoció que los pasajeros afectados comenzaron a ser reubicados en hoteles como Barrarnquilla Plaza y SAIT, mientras se buscaban soluciones, que incluyeron vuelos en la madrugada del lunes 11 de septiembre.
Sumado a esto, se conoció que en el aeropuerto Gustavo Rojas Pinilla de San Andrés también se presentó inconformismo de los pasajeros que viajarían en el mismo avión hacia Barranquilla, por lo que intervino la Policía.