Han pasado casi dos años desde que se perpetró el crimen en el que fue asesinado el entonces presidente de Haití Jovenel Moïse presuntamente a manos de colombianos, algunos exmilitares y todos catalogados como mercenarios, pero de ellos no saben nada sus familiares, quienes aseguran que su proceso sigue igual y sin garantías.
Este viernes 7 de julio se cumplirán exactamente los dos años del hecho y tras no haberse iniciado el proceso sus familiares anunciaron que realizarán desde este jueves un plantón en la Plaza de Bolívar para clamar ayuda del Gobierno con el fin de que los exmilitares detenidos tengan derecho al menos a un juicio justo.
En concreto, son tres las exigencias que harán en medio del plantón:
- Un tribunal alterno en un tercer país neutral donde puedan ser juzgados con todas las garantías
- Permitir que algunos de los familiares puedan viajar junto a funcionarios del Gobierno nacional hasta Haití para visitar a los detenidos
- Exigir apoyo jurídico en ese país.
Lo cierto es que el ahora presidente Gustavo Petro, a quien van a pedirle ayuda, ha mencionado antes el hecho diciendo que Colombia es corresponsable e incluso pidió perdón por el crimen de Moïse.
Gustavo Petro señaló que “fueron mercenarios colombianos los que viajaron a ese país a matar al presidente”, declaraciones que los abogados y familiares de los exmilitares recluidos en ese país rechazaron.
Los abogados haitianos que llevan el caso, Nathalie Delisca y Marc Antoine Maisonneuve, los cuales representan a 9 de los uniformados, trataron de interponer un habeas corpus en noviembre del año pasado solicitando la libertad de los exmilitares, pero aseguraron que después de esto fueron amenazados y la audiencia fue boicoteada.
La abogada Delisca manifestó que el presidente Gustavo Petro complica más la situación de ellos en la cárcel, ya que “dice que se debe pedir perdón a Haití porque los nacionales de Colombia mataron a un presidente en función”.
Entretanto, Maisonneuve indicó que agentes del FBI y de la DEA siguen sacando a los colombianos para interrogarlos, entre ellos a Carmona, pero él piensa que “es una cortina de humo y no fueron con un propósito serio”.
Y denunció: “Hay americanos involucrados en este crimen también. Esta es la razón por la que las cortes haitianas, y en general todos los organismos de control, no quieren intervenir en este problema y tampoco quieren escuchar las súplicas de los exmilitares colombianos debido a que hay intereses de parte de los estadounidenses para que no se haga justicia”.
Otro de los abogados, que prefirió omitir su nombre, dijo que están pidiendo que los militares sean traídos a Colombia o a un país alterno como República Dominicana, donde también hablan español, con unas condiciones especiales y jueces internacionales para que tengan un proceso legal justo”.
¿Qué dijo Petro?
“Quiero ir a Haití, es un tema donde Colombia tiene una corresponsabilidad, primero porque Haití fue el que nos ayudó a ser un país en el pasado, y segundo porque fueron mercenarios colombianos los que fueron a matar al presidente de Haití, desatando una crisis aún peor que la que ya vivían”, declaró el mandatario izquierdista a medios el sábado desde República Dominicana, donde participaba en la Cumbre Iberoamericana.
Sin dar fechas de su posible visita, Petro aseguró que el pueblo haitiano debe resolver su propia crisis, “pero necesita ayuda democrática, no ayuda con base en armas”.
Moïse fue asesinado a balazos a comienzos de julio de 2021 en su residencia particular de Puerto Príncipe, por un grupo comando integrado mayormente por una veintena de exmilitares colombianos.
Estados Unidos ha detenido a 11 personas por participar en el magnicidio desde el sur del estado de Florida (sureste), y entre los sospechosos hay estadounidenses, haitianos, venezolanos y colombianos.
Al menos 17 exmilitares colombianos están en una prisión en Puerto Príncipe por este caso.