A primera hora de este miércoles 30 octubre se reportó un atentado con explosivos al oleoducto ‘La Cira Infantas’, ubicado en la Vereda Planta Nueva en Barrancabermeja.
“Ecopetrol rechaza enfáticamente este atentado que no afectó a personas, pero sí provocó daño ambiental por la pérdida de contención de los fluidos derramados e incertidumbre en las comunidades aledañas a las operaciones de Ecopetrol”, informó Ecopetrol por medio de su perfil de X.
Asimismo, la compañía indicó que las autoridades ambientales ya se encuentra en la zona para evaluar el daño en el ecosistema debido a la gran cantidad de crudo que se derramó.
“La Fuerza Pública investiga en sitio los hechos para determinar las causas del evento”, señaló Ecopetrol.
Por el momento, ningún grupo al margen de la ley se ha responsabilizado como autor del ataque. No obstante en la zona hace presencia el ELN.
Cabe recordar que desde que se rompieron los diálogos con dicha guerrilla, aumentaron los ataque a la infraestructura petrolera de la nación.
El blanco preferido por parte de esa guerrilla ha sido el oleoducto Caño Limón-Coveñas, que recorre siete departamentos del país: Arauca, Boyacá, Norte de Santander, Cesar, Magdalena, Bolívar y Sucre. Contra el cual el ELN ha atacado en cuatro oportunidades en lo que va del año.
Según cifras del Ministerio de Defensa, 2023 fue el año de mayor número de atentados contra oleoductos en Colombia de los últimos cuatro años. Según esos datos, el año pasado se produjeron en total 37 acciones terroristas contra estos, lo que representó un incremento del 85 por ciento con respecto a los 20 que se produjeron durante el 2022.
Pero esa forma de “guerra” data de mucho tiempo atrás. Un informe de la Fundación Ideas para la Paz entregado a la Comisión de la Verdad en 2020 revela que en 30 años, se presentaron más de 3.600 ataques que generaron cerca de 4.400 afectaciones no solo a la infraestructura y bienes de la industria, sino al medio ambiente y a la población civil.
Con información de Colprensa.