El bienestar de los estudiantes colombianos está en riesgo, a raíz de la crisis financiera que enfrenta el Programa de Alimentación Escolar, PAE.
De acuerdo con un informe emitido recientemente por la Contraloría, 781.000 pequeños no han recibido de forma oportuna sus alimentos al inicio de la jornada escolar de 2025.
Y es que la situación se agravó aún más cuando el último pago de más de $230 mil millones, correspondiente a la vigencia de 2024, no llegó a 64 entidades territoriales como estaba presupuestado.
Frente a este panorama, la gobernadora del departamento del Tolima, Adriana Matiz, alertó sobre esta deuda durante la Cumbre de Gobernadores en Villa de Leyva, instando al presidente Gustavo Petro a resolver la situación en el menor tiempo posible.
“La semana pasada ya nos llegó la notificación del último giro del año 2024. Lo que sí se nos quitó de tajo fue la doble ración por parte del Gobierno Nacional. Se nos agregó que los recursos deben alcanzar sólo para el almuerzo y no para desayuno”, explicó y añadió que “esta obligación es imposible sostenerla en los municipios”.
Como en el caso de la ciudad de Neiva, donde el PAE enfrenta una crisis sin precedentes. Más de 32 mil estudiantes de instituciones públicas de esta zona del país quedarán sin este beneficio esencial luego de que el proceso de adjudicación, adelantado por la Administración Municipal a través de la Bolsa Mercantil, fuera declarado desierto, toda vez que está desfinanciado. Este panorama genera preocupación en la comunidad educativa y pone en entredicho la capacidad del gobierno de Gustavo Petro de encontrarle una solución.
Mientras tanto, el Director de la UAPA explicó que la demora en el giro de los recursos se debe al bajo recaudo que ha tenido el país en materia de impuestos. Sin embargo, asegura que el primer pago de este año llegará en las primeras dos semanas de este mes de marzo. “Habíamos girado ya 1.8 billones de pesos y a quienes se les va a girar es a las entidades territoriales que no tienen un músculo financiero”, afirmaron desde la entidad.
Vale la pena destacar que el Gobierno financia casi la totalidad del programa en aproximadamente 30-35 entidades territoriales. Esta situación demuestra que muchas regiones del país dependen de los recursos centrales para mantener el PAE.
Pero la crisis en este sistema va más allá del atraso en los pagos. La Contraloría evidenció que en algunas regiones del país las raciones que se les dan a los niños han tenido que ser recortadas. Situación que es preocupante, teniendo en cuenta que para muchos de estos menores esta comida que reciben en sus colegios es el único alimento que consumen en el día.