Dos fuertes temblores sacudieron a Colombia en la noche de este sábado, 21 de septiembre. El Servicio Geológico Colombiano (SGC) dio a conocer a través de sus redes sociales detalles de los movimientos telúricos.
El último sismo se dio sobre las 7:58 p.m. y tuvo como epicentro el municipio de Lenguazaque, Cundinamarca.
A pesar de que en un principio se informó que la magnitud fue de 4.3, la entidad mencionada concluyó que en realidad fue de 4.0. Algunas personas manifestaron que en distintas partes de Bogotá lo sintieron de manera leve.
Pero el anterior no fue el único, ya que en la tarde de este mismo sábado se presentó otro sismo en el departamento de Santander, lugar que se ha caracterizado siempre por ser una zona de alto riesgo sísmico. Este aconteció sobre las 4:31 p.m. y su magnitud fue de 4.5. La intensidad aproximada fue de 4,5 grados y una profundidad inferior a los 150 kilómetros.
7:58 p.m. - Lenguazaque, Cundinamarca
- Magnitud: 4.0
- Profundidad: 154 km
- Municipios Cercanos: Lenguazaque (Cundinamarca) a 6 km, Cucunubá (Cundinamarca) a 7 km, Villapinzón (Cundinamarca) a 13 km
4:31 p.m. - Los Santos, Santander
- Magnitud: 4.5
- Profundidad: 144 km
- Municipios Cercanos: Los Santos (Santander) a 7 km, Jordán (Santander) a 9 km, Villanueva (Santander) a 16 km
Por el momento, las distintas autoridades no han reportado que por el momento se haya presentado daños materiales o personas heridas en los municipios aledaños del epicentro de estos dos sismos. No obstante, en el caso de Los Santos, Santander, algunas personas por medio de las redes sociales aseguraron que lo sintieron en ciudades como Bucaramanga.
¿Por qué tiembla tanto en Colombia?
La actividad sísmica en Colombia se debe a su ubicación geográfica. El país se encuentra en la convergencia de varias placas tectónicas, incluyendo la Placa de Nazca, la Placa del Caribe y la Placa Sudamericana.
Estas placas interactúan entre sí, generando una gran cantidad de energía acumulada que, eventualmente, se libera en forma de terremotos y temblores. Las placas tectónicas y la presencia de fallas geológicas activas contribuyen a la frecuencia de los sismos en el país.
La placa de Nazca, localizada al occidente, se mueve hacia el este y está subduciendo (o hundiéndose) bajo la placa de Sur América. Por otra parte, la placa del Caribe, ubicada al norte, se mueve hacia el este-sureste y está subduciendo bajo la placa de Suramérica.
“Todas estas características influyen en la alta actividad sísmica del país, en donde pueden registrarse hasta 2.500 sismos al mes, en promedio. Sin embargo, la mayoría de ellos son imperceptibles”, dio a conocer el Servicio Geológico Colombiano.