Este 7 de agosto se cumplió el primer año de gobierno de Gustavo Petro como Presidente, y así como desde Boyacá el mandatario exaltó alguno de los logros de su gestión durante este periodo, desde las regiones siguen llegando algunos pedidos con tareas pendientes, especialmente en materia de seguridad.
Este es el caso del Valle del Cauca en donde en las últimas horas a través de redes sociales la gobernadora Clara Luz Roldán le pidió al presidente atención urgente y especial a la problemática de orden público que vive la región por cuenta de la persistencia en las acciones ilegales de diferentes grupos armados.
Roldán hizo un recuento de algunos hechos violentos que recientemente se han presentado como el ataque a 16 trabajadores de caña en Jamundí y el retén instalado a solo 20 minuto de Cali, al parecer por las disidencias de alias ‘Iván Mordisco’. También le pidió al Presidente -además de inversión social, como lo planteó para el departamento de La Guajira- una intervención militar que permita generar confianza en la población que se ha visto afectada y atemorizada por estas acciones.
“Así como se está haciendo un laboratorio de inversión social en La Guajira, le pido que aquí hagamos otro, pero no solo de inversión social, sino también de un gran despliegue militar en todo el Valle del Cauca para recuperar el territorio, hacer presencia del Estado, dar golpes contundentes al crimen organizado, frenar la extorsión, el secuestro y el atraco, y devolverle la tranquilidad a la gente”, escribió la gobernadora en su cuenta oficial de X (anteriormente Twitter).
Y es que la mandataria seccional fue mucho más allá para explicar y justificar la intervención del Ejército, al asegurar que lo que está ocurriendo en el departamento no es precisamente un “problema de inseguridad doméstico o rutinario”, sino que obedece a dimensiones transnacionales que ya se salen de la manos de la Policía.
“Le pido por favor que usted como Comandante en Jefe de las Fuerzas Militares, venga con el Ministro de Defensa, Iván Velásquez, y tomemos decisiones. Tiene todo nuestro respaldo y disposición, pero venga y lidere”, fue el pedido de Roldán.
Además, concluyó: “Nosotros creemos, como usted, que en el largo plazo solamente brindando oportunidades sociales con comedores comunitarios, mayor educación, más trabajo, oportunidades de acceso a cultura y deporte, podremos bajar la inseguridad. Esto a mediano y largo plazo está bien, pero mañana, la próxima semana, ¿qué hacemos para que baje la violencia?”.
El mensaje de la Gobernadora del Valle se suma también al de otros mandatarios departamentales que aparte de solicitar mayor presencia desde el Gobierno nacional en los territorios impactados por la violencia, han sido críticos de procesos como la denominada paz total.
En varias oportunidades el gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria, ha defendido que los acercamientos con grupos armados tal y como se están planteando no tienen reglas claras ni procesos de verificación que establezcan verdaderos compromisos para que se respete la vida y los derechos de la población civil.
“Desafortunadamente no soy optimista, quisiera serlo pero no soy optimista porque se siguen cometiendo los mismo errores y espero que el presidente y el Gobierno Nacional hagan cumplir lo que han dicho en forma enfática que es su anhelo: que los cese al fuego se conviertan en cese de hostilidades contra la población civil porque lo que hemos es todo lo contrario, se han aumentado esas hostilidades”, declaró Gaviria a propósito del inicio del cese al fuego con la guerrilla del ELN desde el pasado 3 de agosto.
Pese a que los insurgentes acordaron con el Gobierno que no habrá operaciones ofensivas por parte de la fuerza pública, ni acciones criminales por parte de ellos, a solo cuatro días del inicio de estos compromisos, el general Helder Giraldo, Comandante de las Fuerzas Militares, confirmó que ya se han registrado por lo menos seis presuntas violaciones a este cese.
“Se han presentado hostigamientos a la Fuerza Pública, homicidios y confinamientos en Arauca, Cauca y Nariño”, indicó el alto mando militar en medio de la çonmemoración este 7 de agosto de los 213 años del Ejército Nacional y los 204 años de la Batalla de Boyacá.