Los mosquitos suelen ser molestos visitantes del hogar, por lo que muchas personas buscan maneras naturales de ahuyentarlos, ya que algunos químicos pueden causar alergias. La buena noticia para quienes quieren alejar a los zancudos es que la cafeína es tóxica para ellos.
Además, los científicos descubrieron que el café tiene impactos negativos en el proceso embrionario del mosquito Ae. albopictus, ya que sus huevos se hacen menos viables al estar en contacto con el producto, por ello, se concluyó que el usar café y sus residuos para controlar los zancudos es una muy buena solución para eliminar los problemas de contaminación que llegan cuando no se eliminan estos residuos de manera correcta.
¿Cómo usar el café para eliminar a los mosquitos?
Si usted usa cápsulas de café en su cafetera esta será una buena opción para usted y así podrá darles otro uso después de utilizarlas. Si estas son de aluminio o de plástico, lo primero que debe hacer es secarlas muy bien y eliminar los rastros de humedad de las mismas.
Luego, cuando el café esté completamente seco retire la tapa de la cápsula y colóquela en un porta velas o un quemador de incienso. Posteriormente, con ayuda de un fósforo quémelo como si se tratara de incienso. Si la cápsula es de plástico debe sacar el café de la misma para evitar que se queme.
Cuando comience a oler a café tostado podrá asegurarse de que los zancudos no se acercarán, ya que el olor y la cafeína los eliminará por completo.
¿Qué otros usos tiene el café?
Una opción muy popular es reutilizar los residuos de café como abono para las plantas. Basta con añadir un poco a la tierra de las plantas una vez al mes, puede ser puro o mezclado en agua. Este gesto mejora el drenaje y la ventilación de la tierra y ayuda a retener el agua. No solo eso, el residuo del café es bueno para las plantas porque contiene nitrógeno y fósforo, nutrientes que las plantas necesitan.
Los residuos del café tienen usos muy diversos. No solo sirven para las plantas y para usos domésticos, también ayudan a combatir algunas plagas de insectos. Hormigas, caracoles, aunque también los gatos, no soportan el aroma a café. Así pues, un saquito con restos secos de café en puntos estratégicos ayuda a mantener las hormigas fuera de casa y evita tener que utilizar insecticidas.