Además, pueden crecer fácilmente a partir de esquejes pequeños, por ello si quiere cultivar su propia planta de jade, sigue los siguientes pasos:

Si tiene una planta de jade grande, puede cultivar más de estas plantas cortando el tallo de la más grande. Solo debe elegir la parte de la planta que tenga un tallo grueso y hojas saludables.

Recuerde que la tierra debe ser preparada para plantas suculentas

Deje unos cuantos centímetros de espacio entre la parte inferior del tallo y las hojas para que no tenga que retirarlas cuando la vaya a plantar.

Para sembrarla no debe usar tierra abonada común porque es demasiado pesada para esta planta, por ello e portal Wiki How recomienda comprar tierra preparada específicamente para plantas suculentas y agregar varios puñados de arena para darle mejor drenaje. Tenga presente que las plantas de jade necesitan tierra que drene bien.

Realice un agujero pequeño en la tierra para que el tallo pueda caber en él, luego insértelo de manera profunda para que la planta pueda permanecer erguida por su cuenta.

Si el jade empieza a crecer, recuerde que puede trasplantarla a una maceta más grande. | Foto: Getty Images

Otro punto que debe tener en cuenta es que debe acomodar la tierra alrededor del tallo de manera que esté suelta, más no la debe compactar, ya que podría evitar que el agua drene.

La planta debe colocarse en un lugar soleado, pero no directamente hacia la luz del sol porque sus hojas podrían quemarse.

En cerca de cuatro semanas notará los brotes nuevos en la parte superior de la planta, lo que será una buena señal de que la planta ha echado raíces de manera exitosa.

Cuando ya haya echado raíces, puede trasladarla a una maceta más grande si así lo desea.

Para cuidar una planta de jade es necesario conocer que debe dejar secarla antes de regarla. Si toca la tierra y la siente húmeda, entonces la planta no necesita agua.

Ahora bien si nota que las hojas comienzan a marchitarse, significa que la planta no obtiene suficiente agua.

En los meses de invierno, probablemente la planta necesitará que sea regada con menos frecuencia de lo normal, por eso lo mejor es verificar siempre la tierra.

No deje que la planta de jade se asiente en el agua, por ello si llega a notar que hay demasiada agua, debe asegurarse de quitarla del platillo. Y por último evite que las hojas se mojen cuando vaya a regar la planta, sobre todo para que no se pudran.

Si sus hojas se comienzan a poner amarillas, es porque le falta agua. | Foto: Getty Images