Las dalias son flores deslumbrantes y coloridas que embellecen cualquier jardín. Originaria de México, esta planta pertenece a la familia Asteraceae y se distingue por su amplia variedad de formas y colores. Cultivar dalias no solo es gratificante por su belleza, sino también porque es una tarea relativamente sencilla, si se siguen algunas pautas esenciales. En este artículo, explore cómo se cultivan las dalias y qué se necesita para que crezcan vigorosamente.
Elección de tubérculos
El primer paso para cultivar dalias es seleccionar tubérculos de calidad. Los tubérculos son las raíces gruesas de las dalias que almacenan nutrientes. Puede adquirir tubérculos en viveros o tiendas especializadas. Asegúrese de elegir tubérculos firmes y libres de signos de descomposición. Si prefiere, también puede plantar dalias a partir de semillas, pero esto tomará más tiempo para producir flores.
Preparación del suelo
Las dalias prosperan en suelos bien drenados y ricos en materia orgánica. Antes de plantar, es importante preparar el suelo adecuadamente. Siga estos pasos:
- Labranza: Remueva el suelo a una profundidad de 30-40 cm para aflojarlo y mejorar la aireación.
- Enmiendas: Incorpore compost o estiércol bien descompuesto para enriquecer el suelo con nutrientes esenciales.
- pH del suelo: Las dalias prefieren un pH ligeramente ácido a neutro (6.0-7.0). Puede ajustar el pH del suelo agregando cal para aumentar la alcalinidad o azufre para aumentar la acidez.
Plantación de los tubérculos
El momento ideal para plantar dalias es después de la última helada de primavera, cuando el suelo se ha calentado. Aquí hay una guía paso a paso para plantar tubérculos de dalia:
- Cavar un hoyo: Haga un hoyo de aproximadamente 15-20 cm de profundidad y 30 cm de ancho.
- Colocar el tubérculo: Coloque el tubérculo en el hoyo con los ojos (brotes) hacia arriba.
- Cubrir el tubérculo: Rellene el hoyo con tierra, asegurándose de no enterrar demasiado el tubérculo. Debe estar cubierto con unos 5-10 cm de tierra.
- Espaciamiento: Plante los tubérculos a una distancia de 60-90 cm entre sí para permitir un buen desarrollo y circulación de aire.
Riego y fertilización
Las dalias necesitan un riego adecuado para prosperar, especialmente durante los períodos secos. Siga estas pautas de riego:
- Riego regular: Riegue las dalias profundamente una o dos veces por semana, dependiendo de las condiciones climáticas. Evite el riego excesivo, ya que esto puede provocar la pudrición de los tubérculos.
- Mulching: Aplique una capa de mantillo alrededor de las plantas para conservar la humedad del suelo y suprimir las malas hierbas.
En cuanto a la fertilización, las dalias son plantas voraces que se benefician de una alimentación regular. Utilice un fertilizante equilibrado (10-10-10) o uno específico para flores, siguiendo las instrucciones del fabricante. Fertilice cada 4-6 semanas durante la temporada de crecimiento para promover un follaje y flores saludables.
Soporte y poda
Las dalias pueden crecer bastante altas y necesitan apoyo para evitar que se doblen o se rompan. Aquí hay algunas recomendaciones:
- Estacas: Coloque estacas o tutores al lado de las plantas al momento de la siembra. A medida que las dalias crecen, átelas suavemente a las estacas con hilo de jardín o cinta para plantas.
- Poda: Para fomentar un crecimiento más robusto, pode las puntas de las plantas cuando alcancen unos 30 cm de altura. Esto estimulará la ramificación y producirá más flores.
Control de plagas y enfermedades
Las dalias pueden verse afectadas por diversas plagas y enfermedades. Es crucial vigilarlas y actuar rápidamente, si se detecta algún problema. Algunas plagas comunes incluyen pulgones, ácaros y orugas. Use insecticidas orgánicos o jabón insecticida para controlar estos insectos. En cuanto a las enfermedades, el mildiu y la botritis son problemas comunes. Asegúrese de proporcionar una buena circulación de aire y evitar el riego excesivo para prevenir infecciones fúngicas.
Recolección y almacenamiento de tubérculos
Al final de la temporada de crecimiento, generalmente después de la primera helada, es hora de desenterrar y almacenar los tubérculos de dalia para el próximo año. Siga estos pasos:
- Desenterrar los tubérculos: Corte el follaje a unos 15 cm del suelo y desentierre cuidadosamente los tubérculos.
- Limpiar y secar: Lave los tubérculos para eliminar la tierra y déjelos secar en un lugar fresco y seco durante unos días.
- Almacenamiento: Guarde los tubérculos en un lugar oscuro y bien ventilado, como un sótano o garaje, a una temperatura de 4-10°C. Colóquelos en cajas con turba, virutas de madera o papel periódico para mantenerlos secos y evitar la pudrición.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.