Cuando se trata de preparar ensaladas frescas y sabrosas, la cebolla es un ingrediente imprescindible que agrega un toque de sabor y textura inigualables. Sin embargo, muchos individuos se sienten intimidados por el fuerte sabor y aroma crudos de la cebolla. Afortunadamente, existen métodos simples y efectivos para suavizar la cebolla y hacerla más agradable al paladar. En este artículo, se explorarán tres técnicas para lograrlo.

Remojar en agua fría

Uno de los métodos más populares y efectivos para suavizar la cebolla cruda es remojarla en agua fría. Este proceso es fácil de realizar y puede marcar una gran diferencia en la textura y el sabor de la cebolla. Se deben seguir los siguientes pasos para suavizar la cebolla:

Aprenda a suavizar la cebolla y darle un toque suave y delicioso en las ensaladas favoritas. | Foto: Getty Images
  1. Pelar y cortar: Se comienza por pelar la cebolla y cortarla en rodajas finas o dados, según las preferencias del cocinero.
  1. Remojo en agua fría: Las rodajas o dados de cebolla se colocan en un recipiente con agua fría, asegurándose de que estén completamente sumergidos.
  1. Dejar reposar: La cebolla se deja en el agua fría durante al menos 15 minutos. Para obtener los mejores resultados, se puede dejar durante 30 minutos o más si así se prefiere.
  1. Escurrir y secar: Después de que la cebolla haya reposado en el agua fría, se debe escurrir y secar con cuidado utilizando papel de cocina o un paño limpio, asegurándose de eliminar el exceso de agua para evitar que diluya los sabores de la ensalada.

Marinado en vinagre o jugo de cítricos

Otra técnica popular para suavizar la cebolla cruda implica marinarla en vinagre o jugo de cítricos. El ácido en estos líquidos ayuda a descomponer los compuestos intensos de la cebolla y aporta un toque adicional de sabor. Los pasos a seguir para suavizar la cebolla con esta técnica son los siguientes:

El truco para suavizar la cebolla en las ensaladas: consejos esenciales de cocina. | Foto: Getty Images
  • Cortar y pelar: Al igual que en el método anterior, se comienza pelando y cortando la cebolla en rodajas o dados.
  • Colocar en un recipiente: La cebolla se coloca en un tazón y se cubre con vinagre (como vinagre de vino tinto o vinagre de manzana) o jugo de cítricos (como limón o lima).
  • Dejar marinar: Se permite que la cebolla repose en el vinagre o jugo de cítricos durante al menos 15 minutos. Cuanto más tiempo se deje marinar, más suave y sabrosa será.
  • Escurrir y utilizar: Una vez que la cebolla esté marinada a su gusto, se escurre y se utiliza en la ensalada. El vinagre o el jugo de cítricos realzarán los sabores de la cebolla sin abrumarlos.

Blanqueo rápido

El blanqueo es una técnica de cocina que consiste en sumergir un alimento en agua hirviendo durante un corto período de tiempo y luego enfriarlo rápidamente para detener la cocción. En el caso de la cebolla, este proceso puede suavizarla y reducir su intensidad. Los pasos a seguir para blanquear la cebolla son los siguientes:

No más lágrimas: Cómo suavizar la cebolla y hacer que las ensaladas sean irresistibles. | Foto: HeikeRau
  • Preparación de la cebolla: Se pela y corta la cebolla en rodajas finas o dados, como en los métodos anteriores.
  • Agua hirviendo: Se lleva una olla de agua a ebullición y se sumergen las rodajas o dados de cebolla en el agua hirviendo durante aproximadamente 15 segundos.
  • Enfriamiento rápido: Inmediatamente después de blanquear la cebolla, se coloca en un recipiente con agua y hielo para enfriarla rápidamente.
  • Escurrir y utilizar: Una vez que la cebolla esté fría, se escurre y se utiliza en la ensalada. El blanqueo suaviza la cebolla sin perder por completo su textura crujiente.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.