En un mundo saturado de información y donde las tendencias de bienestar y salud van y vienen con la velocidad del viento, existe una práctica que ha resistido la prueba del tiempo: el ayuno. Pero, ¿qué sucede cuando esta disciplina milenaria se entrelaza con la espiritualidad y la devoción? Podrá conocer el enigmático mundo de la técnica de ayuno practicada por los monjes, una tradición ancestral que ha perdurado a lo largo de los siglos, ofreciendo no solo beneficios físicos, sino también espirituales y mentales.

Una vida de devoción y disciplina

En los terrenos serenos de la Abadía de Worth, en Inglaterra, reside el padre Alexander da Costa Fernandes, un monje católico con una experiencia de ayuno que abarca dos décadas. Su práctica, arraigada en la tradición monástica, ofrece una visión única sobre los rigores y las recompensas del ayuno en la vida espiritual.

En un remoto monasterio en las colinas de Inglaterra, el padre Alexander da Costa Fernandes ha perfeccionado una técnica de ayuno que abarca dos décadas de devoción y disciplina. | Foto: Getty Images

El camino hacia la disciplina: Nueve meses de desafío

El monje Alexander no llegó fácilmente a su rutina de ayuno actual. Al principio, enfrentó dolores de cabeza y dificultades físicas al restringir su ingesta de alimentos.

Los secretos del éxito: Acostumbrar al cuerpo al ayuno

Según el padre Alexander, la clave del éxito en el ayuno radica en la progresión gradual. Recomienda comenzar con pequeños pasos, como omitir el desayuno o la merienda de media mañana, antes de pasar a una restricción más estricta.

Descubra cómo el ayuno, una práctica ancestral, se entrelaza con la espiritualidad y la disciplina en la vida diaria de los monjes católicos como el padre Alexander. | Foto: &#169 Getty Images

El equilibrio entre la disciplina y la devoción

Para el padre Alexander, el ayuno va más allá de la mera abstinencia alimentaria; es un acto de devoción y disciplina espiritual. Al comprometerse con esta práctica, encuentra una mayor conexión con su fe y experimenta una sensación de claridad mental y paz interior. Su ejemplo inspira a otros a considerar el ayuno no solo como una herramienta para mejorar la salud física, sino también como una forma de profundizar su conexión espiritual y encontrar un mayor propósito en la vida.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.