Los ratones son roedores que pueden ingresar los hogares por las grietas, las rendijas, las ventanas o puertas. No obstante, es importante señalar que la presencia de estos animales es muy desagradable para algunas personas, pero adicional, pueden transmitir enfermedades.
De hecho, hay que tener presente que los ratones ingresan a los hogares, generalmente, en búsqueda de alimento. pues su olfato puede detectar olores a kilómetros de distancia, y los alimentos que más buscan los ratones en su cocina son:
1. Granos y cereales: El arroz, la harina, la avena, y otros granos y cereales son un manjar para los ratones. Además, es clave tener presente que las cajas o bolsas donde estás estos alimentos, son muy fáciles de roer por estos animales.
2. Alimentos ricos en proteínas: Las nueces, la semillas o carne seca, entre otros, son alimentos que atraen a los ratones.
3. Frutas y dulces: Las manzanas, los bananos, las uvas, y otros alimentos que sean dulces, llaman la atención de los ratones, pues su sabor les resulta agradable.
De igual forma, los ratones pueden ingresar a los hogares en búsqueda de agua, y en especial, si se llega a tener agua estancada.
Por ello, es muy importante almacenar bien la comida que no se utilizará en un corto tiempo en embaces herméticos. Además, hay que evitar tener agua estancada, o reparar los daños de agua que se lleguen a presentar.
Entre tanto, otra recomendación para prevenir los ratones son:
- Mantenimiento regular: Realizar inspecciones periódicas en la cocina para identificar y sellar posibles puntos de entrada. Los ratones pueden aprovechar incluso las grietas más pequeñas en las paredes y los suelos para acceder al hogar.
- Limpieza exhaustiva: Limpiar regularmente las áreas donde se preparan y consumen alimentos. Eliminar las migajas, limpiar los electrodomésticos y aspirar el suelo para reducir las atracciones para los ratones.
- Uso de repelentes naturales: Algunas sustancias, como la menta, el laurel y el aceite de eucalipto, son conocidas por actuar como repelentes naturales para los ratones. Colocar hojas secas o algodones impregnados con estos aceites en áreas propensas a la invasión.
- Colaboración con profesionales: Si a pesar de los esfuerzos los ratones persisten, considerar la posibilidad de contratar servicios profesionales de control de plagas. Los expertos pueden identificar y abordar eficazmente el problema, protegiendo el hogar de futuras invasiones.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.