Uno de los materiales más elegantes y atemporales que se pueden encontrar para la obra blanca de un hogar es sin duda el mármol. Y es que, sus superficies brillantes y pulidas dan un aire de sofisticación a cualquier espacio, ya sea una cocina, baño o piso.
Sin embargo, a pesar de su belleza, el mármol es una piedra porosa y delicada que puede dañarse fácilmente si no se le cuida adecuadamente. Y por eso, algunos limpiadores comerciales, especialmente los que contienen ácidos fuertes o abrasivos, pueden opacar su superficie o causar manchas permanentes
Esta combinación común incluye agua tibia, jabón líquido neutro (o jabón para platos suave), -este tipo de jabón es lo suficientemente delicado para limpiar, sin dañar ni dejar residuos-, alcohol isopropílico, que ayuda a desinfectar y proporciona brillo, eliminando la grasa y las manchas sin ser abrasivo. Y finalmente, aceite esencial de preferencia, aunque puede ser opcional, proporcionando un aroma agradable sin afectar el acabado del mármol.
Receta para el limpiador casero de mármol
- 2 tazas de agua tibia
- 1 cucharada de jabón líquido neutro o jabón para platos suave
- 1/4 de taza de alcohol isopropílico (70% o superior)
- 5-10 gotas de aceite esencial (opcional, para aroma)
Instrucciones:
- Mezclar los ingredientes: En una botella con atomizador, combine el agua tibia, el jabón líquido y el alcohol isopropílico. Agite suavemente la botella para que todos los ingredientes se mezclen bien. Si prefiere, puede añadir unas gotas de aceite esencial, como lavanda o limón, para darle un aroma fresco.
- Aplicación: Rocíe una pequeña cantidad del limpiador casero sobre la superficie de mármol. Use un paño suave de microfibra o una esponja no abrasiva para frotar la superficie con movimientos circulares. Evite aplicar demasiada presión para no rayar la piedra.
- Secado: Después de limpiar la superficie, enjuague el paño con agua tibia para eliminar cualquier residuo de jabón y vuelva a pasar por el mármol para dejarlo limpio. Finalmente, use un paño seco y limpio para pulir la superficie y devolverle su brillo natural.
Consejos para el cuidado del mármol
- Evite los limpiadores ácidos: Sustancias como el vinagre, el jugo de limón o cualquier producto con ácidos pueden corroer y manchar el mármol, por lo que es importante evitar su uso.
- Limpie los derrames rápidamente: El mármol es poroso, lo que significa que absorbe líquidos si se dejan reposar demasiado tiempo. Asegúrese de limpiar cualquier derrame inmediatamente para evitar que penetre y manche la piedra.
- Use siempre paños suaves: Evite cualquier material abrasivo, como esponjas duras o estropajos, que puedan rayar la superficie delicada del mármol.
- Aplique un sellador de mármol regularmente: Dependiendo del uso y exposición, considere aplicar un sellador específico para mármol cada seis meses o un año para protegerlo de manchas y mantener su brillo.