Las lagartijas son visitantes frecuentes en muchos hogares, especialmente en climas cálidos. Aunque suelen ser inofensivas y pueden ser beneficiosas para controlar plagas, su presencia a menudo genera inquietud entre los residentes. Comprender qué las atrae a los hogares puede ayudar a minimizar su presencia y mantener un ambiente más cómodo.
A continuación, se exploran las razones principales por las que las lagartijas se sienten atraídas por las casas y cómo puede manejarse su presencia.
Condiciones favorables: El clima ideal para las lagartijas
Uno de los factores más importantes que atraen a las lagartijas a los hogares es el clima. Estas criaturas buscan ambientes cálidos y secos, pero también necesitan un nivel de humedad adecuado para mantener su piel saludable. La combinación de calor y humedad crea un entorno perfecto para ellas. Las lagartijas requieren un nivel de humedad suficiente para evitar que su piel se seque y para regular su temperatura corporal.
Además, las lagartijas tienden a buscar refugio en zonas con buena exposición solar. Las áreas cercanas a ventanas, puertas y otras aperturas donde la luz solar entra pueden ser especialmente atractivas para estas criaturas. Las temperaturas cálidas dentro de la casa crean un ambiente ideal para su actividad diaria, y por eso es común verlas en el interior de los hogares durante los meses más cálidos.
Fuentes de alimentación: La atracción de insectos
Otra razón clave para la presencia de lagartijas en los hogares es la disponibilidad de alimento. Las lagartijas son insectívoras, lo que significa que su dieta principal se compone de insectos. Si un hogar tiene problemas con insectos como moscas, mosquitos o cucarachas, es probable que las lagartijas sean atraídas por la abundancia de su presa.
Las áreas de cocina, despensas y lugares donde se acumulan restos de comida son puntos críticos para las lagartijas. Mantener estos lugares limpios y libres de restos de alimentos puede ayudar a reducir la presencia de insectos y, por ende, disminuir el atractivo del hogar para las lagartijas. El uso de trampas y métodos de control de plagas también puede ser eficaz en la reducción de la población de insectos y, por consecuencia, en la disminución de la atracción de lagartijas.
Puntos de acceso y refugio: Lugares de escondite y entrada
Las lagartijas buscan refugio en lugares que les proporcionen seguridad y tranquilidad. Las grietas, hendiduras y espacios no sellados en las paredes, techos y suelos pueden servir como puntos de acceso para estas criaturas. Una casa que tiene múltiples puntos de entrada sin sellar puede ser una invitación abierta para las lagartijas.
Inspeccionar regularmente el hogar en busca de posibles puntos de entrada y sellarlos adecuadamente puede ser una medida efectiva para mantener a las lagartijas afuera. Las áreas alrededor de puertas y ventanas, así como las uniones en las paredes y techos, deben ser revisadas y reparadas para evitar que las lagartijas encuentren caminos hacia el interior. Además, mantener el jardín y las áreas exteriores ordenadas y libres de desechos también puede reducir el atractivo del entorno para las lagartijas.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.