El contacto con garrapatas, en áreas rurales y boscosas, puede exponer a las personas a enfermedades potencialmente graves y con consecuencias a futuro. Estos diminutos parásitos, que pueden pasar inadvertidos, son conocidos por transmitir diversos patógenos al hospedero durante la picadura.
Aunque existen productos comerciales para combatirlas, muchas personas prefieren recurrir a remedios caseros más naturales. En este artículo, se explorarán algunos remedios caseros efectivos para eliminar las garrapatas y prevenir su infestación:
- Bicarbonato de sodio y sal: una mezcla de bicarbonato de sodio y sal puede ayudar a desalojar las garrapatas que se han adherido a la piel. Se puede mezclar una cucharadita de bicarbonato de sodio y una cucharadita de sal en un recipiente con agua tibia para hacer una pasta y luego aplicar sobre la piel.
- Vinagre de manzana: el vinagre de manzana es conocido por sus propiedades desinfectantes y puede ayudar a aflojar la garrapata de la piel. Se puede empapar un algodón en vinagre de manzana y aplicarlo sobre las zonas afectadas durante varios minutos o aplicarlo en un atomizador y rociar sobre su mascota.
- Extracto de limón y ajo: una mezcla de extracto de limón y ajo puede ser efectiva para repeler garrapatas. Para prepararla, se deben mezclar varios dientes de ajo picados y el jugo de un limón en una licuadora hasta obtener una pasta. Esta pasta se puede aplicar en la piel o mezclar con agua y rociar sobre la ropa y áreas infestadas.
- Infusiones de esta planta: el aroma de esta hierba sirve para eliminar estos incómodos insectos, especialmente si lo que buscan es invadir los rincones de la casa. ”Lo único que hay que hacer es hervir agua y manzanilla, dejar que la infusión se enfríe y mojar al perro con un paño embebido. Las garrapatas se van a ir muy rápidamente”, sugiere el sitio web Cleanipedia.
Poderoso té contra las infecciones
Las infecciones virales son un riesgo continuo para la salud de las personas. Como su nombre lo indica, la enfermedad es causada por un virus, que puede entrar al organismo de una forma muy sencilla al respirar, por sus partículas desprendidas en el aire, o de maneras más específicas como por la picazón de una garrapata o un insecto, o luego de mantener relaciones sexuales.
Lo que ocurre al interior del cuerpo es que el virus ingresa e inmediatamente es atacado por los glóbulos blancos hasta que lo destruyen, por lo que en la mayoría de ocasiones la enfermedad aparece poco después de contraer la infección y desparece con los días.
Sin embargo, lo mejor es no subestimar estas afecciones, ya que existen casos en los que esos virus incorporados al organismo pueden cambiar la manera en la que funcionan las células, llegando a provocar diferentes tipos de cáncer en situaciones extremas.
Por ejemplo, los virus de la Hepatitis B y C están en capacidades de generar cáncer de hígado, y el Virus de Papiloma Humano (VPH) puede causar, entre otros, cáncer de cuello uterino.
Pese a esto, hay que mencionar que las infecciones víricas más comunes no son las ya mencionadas, sino que suelen serlo, por ejemplo, la gripe o los resfriados, lo cual produce malestar general e interfiere en el correcto funcionamiento de la respiración. De acuerdo con el portal GatroLab, el té de orégano y ajo contiene potentes propiedades que ayudan a combatir estos y otros problemas relacionados, como el asma y las bronquitis aguda y grave.
Esto gracias a su contenido rico en yodo, fósforo, potasio y vitaminas. También tiene propiedades antibióticas, por lo que suele incluirse en la preparación de diferentes remedios naturales.
Una solución natural como esta siempre trae beneficios para la salud, según Harvard, pero esto debe estar acompañado de una buena dieta diaria, actividad física constante y cambios de hábito que suelen ser sedentarios para que el efecto positivo llegue a ser el esperado.