El agua es esencial para la vida humana, pero debido al cambio climático y el mal uso que le da el hombre, esta fuente se ha ido agotando, por eso es importante revisar cuáles son los hábitos que se tienen en casa para ahorrar el vital líquido.
En torno a este debate también surge la pregunta cómo se consume más agua, ¿lavando a mano en la lavadora?
Algunos expertos en tecnología y sostenibilidad, entre ellos la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), aseguran que esta inquietud no es fácil de responder como se creería.
La lavadora de carga frontal puede ser más eficiente en el uso del agua si se compara con una de carga superior.
Lo anterior porque las lavadoras de carga frontal utilizan menos agua y energía al funcionar con menos cantidad de agua durante el ciclo de lavado.
Además, suelen tener una mayor capacidad, esto significa que pueden manejar cargas más grandes con la misma cantidad de agua que una lavadora de carga superior.
Lavado a mano
Por el contrario, el lavado a mano puede parecer una alternativa más sostenible, ya que permite un control más directo sobre la cantidad de agua utilizada.
No obstante, este método también puede consumir una cantidad significativa de agua si se realiza de manera ineficiente.
Es decir, si se deja correr el agua mientras se enjabonan las prendas, o utilizar grandes cantidades de agua para enjuagar, pueden aumentar considerablemente el consumo total.
Diferencia entre los dos métodos
Según Infobae, un estudio realizado por la Universidad de Bonn en Alemania comparó el consumo de agua entre el lavado a mano y el lavado en lavadora.
Según se pudo establecer, el lavado a mano consumía, en promedio, alrededor de 105 litros de agua por carga, mientras que una lavadora de carga frontal utilizaba aproximadamente 55 litros por carga. Por lo que se podría concluir que la lavadora es la opción más eficiente en cuanto a consumo de agua.
No obstante, hay que tener en cuenta las prácticas de lavado, ya que una lavadora de carga frontal solo será más eficiente si se utiliza con cargas completas y se elige el ciclo adecuado para el tipo de ropa.
Del mismo modo, el lavado a mano puede ser más eficiente si se aprovechan técnicas como el remojo y la reutilización del agua de lavado para tareas adicionales, como regar las plantas.
Además del consumo de agua, es necesario tener en cuenta factores ambientales asociados con cada método de lavado.
De ahí que no haya una respuesta definitiva en cuál método de lavado es más eficiente. Tanto el lavado a mano como en lavadora tienen sus ventajas y desventajas en términos de consumo de agua y otros impactos ambientales.