La Navidad es la época más esperada del año porque se comparte con familia y amigos y las casas se llenan de luces y color. Además, como parte de la decoración del árbol, el pesebre, están las plantas, que también llenan de buenas energías el ambiente del hogar.
La más famosa de todas es la Flor de Pascua, pero existen otras tres plantas que según el Feng Shui alegran los espacios y atraen la buena suerte y la abundancia, que son el acebo, el muérdago y la rosa de Navidad.
El acebo: el acebo es un arbusto que se distingue por sus frutos de color rojo en forma de bolitas. Precisamente por esos frutos es muy común usarlo en la decoración navideña. Según la historia, los celtas fueron los primeros en crear coronas con ramas de acebo para proteger sus casas en contra de los malos espíritus y para asegurar la prosperidad. En nuestros días, siempre suele estar en las coronas de Navidad que se cuelgan en la puerta de entrada, sitio perfecto para proteger y atraer la buena suerte.
El muérdago: el muérdago es también una planta muy usada en la decoración navideña, se usa particularmente para la decoración de las coronas navideñas tradicionales que se colocan en la puerta de entrada de la casa. Alrededor del muérdago hay muchísimas leyendas, por ejemplo, era un árbol mágico para los druidas y lo utilizaban para realizar sus conjuros y recetas medicinales.
Por su parte, los escandinavos lo relacionaban con la diosa del amor Freya, de ahí la tradición de los enamorados de besarse bajo la rama del muérdago para atraer la buena suerte en la pareja. Pero fue hasta el siglo XVII cuando el muérdago se expandió por Europa y se convirtió en tradición el ser regalado entre amigos y familiares en Navidad para desear la buena suerte.
Según el Feng Shui, si quiere usar el muérdago en la casa para atraer esa buena suerte, debe colocarlo cerca de la entrada, ya sea en el recibidor o en la puerta, por ejemplo. Una opción sería incorporar algunas ramitas de muérdago en una corona de Navidad.
Rosa de Navidad: es también conocida como eléboro o rosa de eléboro. Esta flor es una hermosa planta de invierno con flores de pétalos blancos la cual, curiosamente, suele crecer en la nieve. Esta planta es considerada como un símbolo de fortaleza, pureza y superación personal gracias al color blanco de sus flores y a su capacidad de crecer en las circunstancias más duras y adversas. Por eso, si lo que quiere atraer a tu vida es fuerza y coraje, la rosa de Navidad es la que necesita tener en su decoración navideña.
Como curiosidad, el eléboro está muy arraigado a la tradición cristiana navideña, ya que, cuenta la leyenda que cuando los Reyes Magos llegaron al portal de Belén con sus ofrendas, una doncella empezó a llorar porque no tenía nada que ofrecer y fue un ángel quien le dio una rosa de eléboro para que se la regalara al Niño Jesús.