Existen miles de diferencias entre los vehículos automáticos y los manuales, una rivalidad que perdura en los usuarios que defienden cada uno de acuerdo a su preferencia y al lugar donde resida el conductor.
Lo cierto es que cada uno tiene sus referencias, características y beneficios particulares que lo vuelven esencial e ideal para cada persona. Por eso, a la hora de adquirir un carro, el comprador debería tener ciertas exigencias.
Carros automáticos
Uno de los principales aspectos es la caja de cambios, la cual significa que el conductor libera conforme va avanzando, la posibilidad de aumenta la velocidad del vehículo.De acuerdo con el portal Momentum Motor Always movin, “se trata de una máquina más sencilla de manejar, por lo que su uso requiere un aprendizaje mucho más fácil y rápido. Esto, sin duda, juega a su favor”.
La caja de cambios automática tiene una clave para su correcto funcionamiento. Se trata de la parte hidráulica, donde “a través de un convertidor de par y un conjunto de engranajes, proporciona la multiplicación que hace moverse al par”. Además, una bomba de aceite y una turbina, que, respectivamente, lanza el aceite y lo recibe.
Aunque, la enumeración suele ser diferente a los manuales, ya que vienen del 1 al 5 (o al 6 en los modelos más actuales) y cuentan también con la marcha atrás. “Estas son P de parking, R de marcha atrás, N de punto muerto y D, en la que entran todas las marchas que se puedan multiplicar, lo que equivaldría de la 1 a la 6 en un coche manual”.
La fuente citada también agregó que “algunos coches cuentan con otras 4 marchas extra”. Una de ellas es la S, similar a la D, “pero implica cambios de marcha más bruscos y con más revoluciones”; está la L para marchas más cortas, “ideal para fuertes pendientes en las que impide que entren marchas largas”; “M para hacer un control manual de una marcha concreta; y W de winter, poco común y especialmente indicada para arrancar de manera suave en caso de nieve”.
Carros manuales
Por su parte, estos vehículos son más frecuentes y comunes de ver. Incluso, en clases de conducción suelen ser usados como medio de aprendizaje, la cual deberá ser cambiada en función de la velocidad que el vehículo adquiera. Es ahí cuando el embrague de libera, una vez engranada la nueva marcha.
“La palanca de cambios manual va asociada al embrague, que tiene que pisarse con el pie izquierdo para que así motor y ruedas se liberen de la transmisión y se pueda cambiar de marcha”, señaló la fuente citada anteriormente.
En concreto, con respecto a las características, la plataforma señaló que comprar un coche automático “consume un 5 % más, aproximadamente, que un coche manual. Este porcentaje se ha reducido con los años, ya que hace un tiempo se estimaba que la diferencia rondaba el 10 %”.
Los usados más vendidos
Por su parte, recientemente, el valor de los vehículos usados disminuyó un 4,43 %. De acuerdo con Andemos, solo en el mes de mayo de este año, se registraron 15.695 nuevos vehículos en el país, cifra que, comparada con la del mismo periodo en 2022, supone una reducción del 30 %, dado que las unidades vendidas fueron 22.435.
Así las cosas, la reducción en la venta de carros nuevos estaría relacionada con la desescalada que han tenido los precios de los vehículos usados.
“Las altas tasas de interés han frenado el consumo de bienes durables, entre ellos el mercado de vehículos, por lo que es fundamental que el sector financiero rompa el ciclo a alzas de interés para mitigar el impacto del costo del dinero”, afirma García.
Con esto en cuenta, le presentamos los vehículos con menos de 100.000 kilómetros más económicos del mercado, según Andemos:
- Renault Clio: desde $26 millones.
- Renault Logan: desde $26 millones.
- Mazda 6: desde $27 millones.
- Mazda 3: desde $29 millones.
- Toyota Hilux: desde $36 millones.
- Toyota Corolla: desde $39 millones.