La rata negra es peligrosa, por lo tanto, si tiene una infestación en su lugar de residencia o de trabajo debe actuar rápidamente para evitar que escale el problema, pues estos roedores son una verdadera plaga para los humanos y pueden causar graves enfermedades.
Inclusive, algunas de estas enfermedades pueden ser potencialmente mortales. Y como si fuera poco, estos animales son capaces de ocasionar daños estructurales en los inmuebles muy serios.
En algunos casos, las autoridades han reportado incendios ocasionados por ratas negras que han roído cables.
Rata negra o asiática
La rata negra (Rattus rattus) que es la que más proliferan en el país, es un roedor procedente de Asia, de ahí su nombre de rata negra asiática.
Esta especie es conocida por ser ágil, tener una gran capacidad de adaptación a distintos medios y, lo más grave, ser de rápida reproducción.
Todas estas características la convierten en una plaga complicada, difícil además de eliminar.
Pese a su nombre, esta especie de rata puede ser de color negro hasta marrón claro y son de tonos más claros en su parte inferior.
Cómo llegó la rata negra
Si bien la rata negra es originaria de Asia, este animal se encuentra en todos los continentes y es una de las ratas más comunes en el mundo. No se sabe con seguridad cómo fue su distribución por Europa y Latinoamérica, pero se piensa que tuvieron un gran avance debido a la expansión del Imperio Romano y después durante la Edad Media.
Desde hace 2 años, algunos países, entre ellos España, ha observado un aumento en la cantidad de ratas en distintas ciudades.
Lo común era ver estas ratas negras en ciudades portuarias, pero ya se han ido expandiendo por el territorio. Sin embargo, se recomienda a las personas además de ubicar trampas y productos químicos para su control, tener cuidado con algunos que son muy tóxicos y si la situación se sale de control, dejarlo en manos de profesionales o recurrir a las Secretarías de Salud de cada localidad.
La rata negra se caracteriza por su capacidad de trepar. Esta habilidad le da la capacidad de acceder a pisos superiores con mayor facilidad y de buscar refugio y comida en árboles. De hecho, es común encontrarla en parques y jardines, haciendo nidos en los árboles. Por eso se pueden confundir con los de las aves.
Así como trepan árboles, también alcanzan tejados, postes, áticos, tendidos eléctricos y más. De hecho, a pesar de que las ratas suelen ser asociadas con sistemas de alcantarillado, las ratas negras no ingresan a ellos. Suelen preferir zonas con vegetación para hacer sus nidos aéreos.
Tamaño
Una rata negra es considerada un roedor de tamaño mediano. En promedio mide de 13 a 18 cm de largo, sin incluir una larga cola de aproximadamente 15 a 22 cm. Su peso está entre 75 y 250 g. Muchas veces llaman la atención por su color, pero en cuestión de tamaño son más pequeñas que las ratas comunes, que miden hasta 27 cm y pesan hasta 580 g.
Se sabe que las ratas negras son animales omnívoros. Su dieta consiste en frutas, semillas, nueces, granos y cereales. También consumen invertebrados como insectos. En un día comen 15 gramos y beben 15 mililitros de líquido, aproximadamente.
¿La rata negra es peligrosa?
La rata negra puede ser muy peligrosa, aunque no son agresivas: Estos roedores transmiten enfermedades graves como leptospirosis o enfermedad de Weil, salmonelosis, listeriosis, toxoplasmosis e infecciones causadas por hantavirus. A pesar de que existen tratamientos para la mayoría de estas enfermedades, pueden ser mortales en personas susceptibles por otras enfermedades de base.
La capacidad reproductiva de este animal también es diferente, ya que la rata común tiene entre 5 y 8 camadas al año, mientras que la rata negra tiene entre 2 y 5.