Los muebles de madera son los elegidos en muchos hogares debido a la calidez y elegancia que estos aportan a cada espacio, sin embargo, mantenerlos limpios y en buen estado puede ser una tarea un tanto desafiante.
Para este problema, el mercado actual ofrece distintas opciones que prometen devolverle la vida a estos elementos, pero suelen ser agresivos. Por ello, hay algunos trucos caseros que pueden ser efectivos para mantener los muebles en óptimas condiciones.
Uno de estos trucos es el del vinagre, para lo que se necesitará un rociador, 1 litro de agua, pulidor de muebles, paños de microfibra, detergente líquido para platos y, por supuesto, 2 cucharadas de vinagre blanco (30 mililitros).
Con estos materiales a la mano, el primer paso es mezclar partes iguales de agua y vinagre blanco. El vinagre actúa como un desinfectante natural y ayuda a eliminar la grasa y la suciedad acumuladas.
Después se debe añadir dos gotas de detergente para platos, que también es útil para remover las manchas de grasa. Con estos tres elementos mezclados, el siguiente paso es añadir la solución al rociador, luego, agitarlo, y seguido a ello, rociar a la parte exterior de los gabinetes de madera.
Esto se debe dejar actuar durante dos minutos y repasar con un paño de microfibra seco, sin fregar fuerte. Si el paño está húmedo y goteando, el exceso de humedad podría dañar la madera.
Es fundamental prestar gran atención a las áreas más sucias o grasientas, como las superficies alrededor de la estufa y el fregadero. Evite usar demasiada fuerza para evitar rayar la madera.
Después de limpiar toda la superficie, se debe secar los muebles con un paño limpio y seco para eliminar cualquier exceso de humedad. Asegúrese de no dejar agua estancada en las grietas o juntas de los muebles, ya que esto podría provocar daños a largo plazo.
Para un acabado brillante, se puede aplicar un producto pulidor o cera para muebles de madera una vez que haya secado. Para esto se debe utilizar otro paño seco y limpio.