Las arrugas alrededor de los ojos son una preocupación estética común, pero con el maquillaje adecuado, se pueden disimular y conseguir una mirada rejuvenecida. En este artículo, se presenta un truco sencillo y efectivo para ocultar esas molestas líneas de expresión y lograr una apariencia fresca y radiante.
Revelando los secretos: El corrector perfecto
En una entrevista del portal VOGUE con el maquillista profesional Andy Alexis, conocido por su trabajo con novias y celebridades, se desvelan los errores más comunes al aplicar corrector. Según Alexis, la clave radica en la hidratación adecuada de la zona de las ojeras. Este paso es fundamental para lograr un acabado impecable, evitando así el aspecto cuarteado o parchado que puede resultar de una piel mal preparada.
Maestría en el difuminado: La importancia de una aplicación uniforme
Una de las recomendaciones principales de Andy Alexis es el correcto difuminado del corrector. Recomienda aplicarlo con los dedos o con una esponja, asegurándose de extender el producto de manera uniforme sobre la piel. Este paso no solo garantiza una cobertura completa, sino que también prepara el lienzo para el siguiente paso crucial en el proceso de maquillaje.
Sellado eficiente: El truco para evitar pliegues no deseados
La etapa final y esencial, según el maquillista, es el sellado con polvo translúcido. Pero aquí está el detalle: Alexis aconseja aplicar el polvo con una esponja ligeramente húmeda y presionarlo sobre la piel, en lugar de usar una brocha. ¿La razón? Menos probabilidades de que el polvo se compacte con el corrector, reduciendo así la aparición de pliegues no deseados alrededor de los ojos. Este truco, compartido por el experto, promete un acabado impecable y duradero que desafía al paso del tiempo.
Desde la preparación adecuada hasta la técnica de aplicación, cada paso en el proceso de maquillaje del contorno de ojos es crucial para lograr un resultado deslumbrante.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.