“En las últimas semanas he visto varios atracos desde motocicletas a personas que van en carro, están en las afueras de un restaurante o simplemente caminando”, relata *Ignacio Guerrero, un ingeniero residente en el barrio El Ingenio, al sur de Cali. Su testimonio es similar al de muchos ciudadanos que observan este tipo de delitos a diario.
*Ignacio señala que la inseguridad es real. Su barrio figura entre los 20 sectores donde ocurren con frecuencia estos asaltos callejeros.
“Llegan en una, dos o hasta en tres motos, acorralan a las personas y las amenazan con armas de fuego”, afirma el profesional.
Ese accionar lo corrobora un investigador de la Sijín, al señalar que los maleantes casi siempre están secundados de cerca por un vehículo al que entregan los elementos hurtados y las armas luego del asalto para desaparecer evidencias.
Como detalle adicional anota, que bajo ese modus operandi en el carro involucrado va el líder de la banda, quien coordina los movimientos y marcación de las víctimas o negocios.
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Esta modalidad por parte de los llamados ‘mosqueteros’ se volvió usual, ya que por la prohibición del parrillero hombre, los malhechores usan varias motocicletas cada una con un conductor para huirle a la norma.
Por ello, la indignación está en ascenso entre los caleños, ya que este tipo de delitos, entre otros, confirma que el 70 % de las personas se declaran inseguras cuando salen a la calle, según la última encuesta del programa ‘Cali Cómo Vamos’.
Lo peor, señala la presidenta de la Asociación de Clubes de Moteros, Paola Sánchez, es que los mismos motociclistas también son víctimas de la delincuencia. En promedio en atracos a mano armada y mediante la modalidad de halado, los criminales roban en promedio entre 10 y 12 motos por día en Cali, asegura la dirigente.
Por su parte, el concejal Roberto Rodríguez sostiene que el llamado ‘Plan Motocicletas’ no cuenta con personal policivo suficiente para patrullajes y controles, evitando así que más personas sean heridas o asesinadas.
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Violencia y sorpresa
Los asaltos se caracterizan por el factor sorpresa y la extrema violencia (llegando hasta el homicidio) si las víctimas se resisten a entregar bolsos, morrales y celulares, e incluso su motocicleta. Así lo muestran los cientos de videos de cámaras de seguridad que circulan en las redes sociales.
Al respecto, el cabildante Rodríguez llama la atención porque “durante estos atracos 1.650 personas fueron heridas con armas blancas y de fuego en el 2020, y en este año los heridos suman 226”.
Sostiene que el “60% de los hurtos fueron cometidos por delincuentes motorizados para despojarlas de sus celulares. El problema ya lo conocemos, pero no lo quieren escuchar porque no existen unos buenos controles”.
De hecho, personalidades caleñas como el concejal Fernando Tamayo y el bailarín de salsa Luis Eduardo Hernández, ‘El Mulato’, director de Swing Latino, han sido víctimas de los atracadores en moto. El artista resultó herido en la cabeza en septiembre del 2020 tras ser golpeado por cuatro hombres frente a su escuela en el barrio Champagnat.
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Por su parte, el cabildante Tamayo y su esposa fueron interceptados violentamente por dos individuos en motocicleta el pasado 19 de enero del 2021 mientras caminaban por el barrio Granada, en el oeste de Cali. Los delincuentes amenazaron con herirlos para que entregaran sus pertenencias. Tamayo se declaró alarmado.
Según el mismo investigador de la Sijín de la Policía, en muchos casos los asaltantes usan las llamadas motos ‘señoriteras’, es decir, de baja cilindrada (100 o 125 c.c), pero también otras de mayor pique como las NKD.
Según el especialista, Gustavo Orozco, esta clase de delito en el caso de Cali ha crecido por la falta de una verdadera política en este campo, pues “al parecer esto no es prioritario en la actual administración”.
Anota que la falta de mayor inversión en equipos, cámaras, patrullas y otros apoyos para frenar la inseguridad, “muestra una desconexión con la realidad que vive la ciudad en la actual pandemia. Es como si los funcionarios estuvieran en otra galaxia”.
El 40 % de los hurtos en 2021 han ocurrido en las comunas 2, 3, 17 y 19, siendo los días jueves y viernes donde más se presentan, según un reporte del Observatorio de Seguridad
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Bandas motorizadas
Se estima que en Cali existen al menos unas veinte organizaciones que cometen delitos en motocicletas, que van desde el hurto hasta el cobro de extorsiones, exigencia de pagos por ‘gota a gota’, y sicariato.
El hurto de estos vehículos ha contribuido también de alguna forma al auge del atraco callejero. A los mismos los modifican y les ponen placas falsas. Otra característica es que los asaltantes se camuflan como mensajeros o domiciliarios, detalla el investigador.
En algunos retenes de control, la Policía ha descubierto adaptaciones especiales en el sillín y los tanques de gasolina para ocultar armas.
Durante recientes operativos de Policía y Tránsito han sido inmovilizadas 4.020 motos, de ellas 485 por violar la norma de parrillero-hombre.
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Cabe resaltar que a muchas personas, a quienes les fueron robadas sus motos, casi nunca las recuperan. Sin embargo, la Sijín asegura que se están recuperando entre 10 y 15 cada dos semanas de estos vehículos.
Los maleantes esconden las motos en caletas detectadas en algunos barrios del nororiente, el Distrito de Aguablanca y en zonas de ladera como Altos de Meléndez, que a juicio de los moteros afectados “son lugares impenetrables por su peligrosidad”.
El oficial investigador de la Sijín menciona que “tenemos identificados varios de esos sitios donde también desguazan las motos, las envían hacia el departamento del Cauca y las modifican para impedir su identificación”.
Según datos entregados por el concejal Rodríguez, entre el 2016 y el 2020 fueron hurtadas 14.000 motocicletas y 10.000 automóviles en esta capital.
De acuerdo con el último informe del Observatorio de Seguridad y Justicia y la Fiscalía, el hurto de celulares a las personas representa el 30 % de los casos en lo corrido del 2021.
Aunque no lo dice el reporte, se presume que la mayoría de las víctimas fueron despojadas de sus teléfonos en atracos en motocicleta, a pie, por ‘cosquilleo’ en el MÍO, o mediante el raponazo. En el año 2020 los hurtos de celulares representaban el 24 %.
Las denuncias por hurto en el primer trimestre del 2020 sumaron 6.822. En igual lapso del 2021 llegan a 5.275.
*Nombre cambiado a petición de la fuente
Planes y sitios de alto riesgo
El secretario de Seguridad y Justicia, Carlos Alberto Rojas, asegura que el ‘Plan Motocicletas’ está operando hace dos meses entre Tránsito y Policía en lugares con mayor incidencia de hurtos.
“Hace poco se impusieron 1.500 comparendos durante esas revisiones y tenemos reportes de un 50 % por porte ilegal de armas traumáticas o sin permiso”.
Admite que hay bandas conectadas con el narcotráfico que utilizan estos vehículos, por lo que se intensificarán los operativos.
Con base en el reporte del Observatorio de Seguridad al 25 de marzo, hubo un aumento de todo tipo de hurtos en 20 barrios. Entre ellos figuran El Caney (donde crecieron 72 %) en el primer trimestre, Granada, Santa Mónica, Alameda y Vipasa. Les siguen San Pedro, Valle del Lili, Sucre, La Flora, El Ingenio, San Nicolás, San Fernando Viejo, San Bosco, Ciudad Córdoba, Alfonso Bonilla, El Calvario, Tequendama, San Vicente y San Joaquín.
Últimamente en 15 sectores los hurtos se han disparado entre un 30 % y un 200 % como en Las Granjas, Parque del Amor, Barranquilla, Omar Torrijos, Bretaña, Eucarístico, San Luis II y Julio Rincón.
No satanizar la moto
Paola Sánchez, líder de los clubes de moteros de Cali, dice que “este vehículo no debe ser satanizado, porque el mismo lo utilizan a diario miles de personas honestas”.
Y revela que lo atracos a los motociclistas suceden en el Puente de los Mil Días, la Autopista Simón Bolívar, detrás del hospital Club Noel, la Calle 26, Puerto Rellena y en las salidas a Palmira, Yumbo y Jamundí. También en la Avenida de los Cerros, Juanchito y la vía al mar.