Con un total de 23 homicidios, la mayoría ocurridos en el oriente de Cali, el pasado puente festivo fue uno de los más violentos de 2018. Nueve de los casos se registraron el viernes, cinco el sábado, cinco el domingo y cuatro el lunes festivo.
La cifra triplica el número de homicidios que en promedio se cometen en la capital del Valle los fines de semana (8). La estadística también supera los asesinatos ocurridos en otras ciudades del país, como en Bogotá, donde este fin de semana festivo hubo siete asesinatos, y como también en Medellín, ciudad que registró entre viernes y lunes cuatro casos.
Datos del Observatorio de Seguridad de Cali muestran que hasta el 11 de noviembre del presente año, en la ciudad se habían registrado 1001 muertes violentas, (36 menos que en 2017), siendo el Oriente y la Ladera las zonas más críticas.
“Evaluando el comportamiento de los homicidios en los últimos 25 años se observa que históricamente se concentra más este delito en las comunas 13, 14, 15, 21 (Oriente) y 20 (Ladera). Sin embargo, hemos visto que también empezó a concentrarse en las comunas 6 (Nororiente), 3 y 9 (Centro)”, informó Álvaro Pretel, coordinador del Observatorio.
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De acuerdo con el analista, el 66 % de los móviles de las muertes violentas en la ciudad están relacionados con la delincuencia, el 26 % con problemas de convivencia y el 8 % restante con otros motivos.
En este sentido, el experto explicó que en la Comuna 15 gran porcentaje de muertes se dan por acciones de venganzas y asuntos relacionados con el patrimonio, pero también por problemas de convivencia con enfrentamientos entre pandillas.
Por su parte, en las comunas 6, 13, 14, 20, 21 y 18 los homicidios están relacionados, entre diferentes causas, con el tráfico de estupefacientes.
“Esto se ve mucho en zonas aledañas al Jarillón del río Cauca; la parte alta de la Siloé; el límite de las comunas 13 y 15, donde se ubican fronteras invisibles; y un poco en la Comuna 18, en el suroccidente de Cali. En estos puntos la mayoría de los homicidios se cometen con arma de fuego”, aseveró Pretel.
Por su parte, los homicidios en el centro de Cali son cometidos en mayor parte con arma cortopunzante y se dan por enfrentamientos y riñas entre habitantes de calle o residentes de barrios como El Calvario y Sucre.
Asimismo, en la lista de los 39 barrios con mayor número de homicidios en la capital del Valle, 12 presentan un incremento de casos este año. El Vergel, Potrero Grande, Comuneros I, Siloé y Mojica son los cinco sectores más impactados por el homicidio y juntos suman un total de 114 muertes violentas, 9 casos más comparado con el 2017.
Más soldados para la seguridad
Ante la lamentable cifra de homicidios que dejó el puente festivo, el secretario de Seguridad, Andrés Villamizar, señaló que, a pesar de ser preocupante la cifra, no se debe “perder de vista” que el consolidado de asesinatos en el año tiene un saldo favorable en comparación con el 2017, y que los últimos tres años “han sido los menos violentos de la historia reciente de Cali”.
Por esta razón, el funcionario acompañó “entusiasmado” la presentación este martes de 270 nuevos miembros de la Policía Militar, que comenzarán a apoyar las labores de seguridad en Cali.
“Con este grupo se completan 620 uniformados del Ejército que patrullan las calles de Cali. Llegan para seguir acompañando las estrategias de la Policía Metropolitana en busca de la reducción del homicidio y otros delitos de alto impacto”, dijo el Secretario.
En opinión del coordinador Álvaro Pretel, el violento fin de semana que vivió la ciudad ha dejado a todos muy sorprendidos ya que e l promedio de homicidios venía siendo muy bajo.
Planteando una reflexión resalta que “las personas empiezan a darse cuenta de este fenómeno y de su complejidad, por lo cual es muy importante que rechacen estos actos y exijan la paz a todos los ciudadanos”.
Frente a la situación, también se pronunció el secretario de Seguridad en su cuenta de Twitter: “Todos podemos y debemos jugar un papel. Ciudadanos empoderados: Frentes locales de seguridad, redes de apoyo, denuncia y reporte efectivo de delitos y hechos sospechosos. Solidaridad. Cumplir normas. Unidos lo logramos”.
Esta misma visión es contemplada por el experto en seguridad Jesús Darío González, investigador de la Fundación Ciudad Abierta, quien considera que los hechos ocurridos en el fin de semana no deben pasar desapercibidos.
“Este asunto es tan delicado que no podemos dejárselo solo a la Policía y al Ejército, es un asunto que requiere de todas las fuerzas vivas de la sociedad caleña. Requerimos gestos de gobernabilidad y un llamado a la ciudadanía a una rectificación. Así como se nos quemaron los cerros y se habló de involucrar a los caleños, hay que decir que los 23 seres humanos menos nos duelen. Hoy (ayer) tendríamos que haber declarado un día de duelo en Cali”, expresó el investigador.
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