"El día 6 de junio de 1910 nació en el Bolo-Alizal, vereda del municipio de Palmira, departamento del Valle del Cauca, en la República de Colombia, una linda princesa de piel trigueña y ojos verdes, a quien dieron el nombre de Jovita”, se lee en la Biografía de las Ilusiones de Javier Tafur, el hombre que le contó a Cali y al mundo la historia de la entrañable Jovita Feijóo, eterna reina de Cali.
Una mujer que en vida iluminó las calles de la capital vallecaucana con su excéntrica personalidad, su distinguido atuendo y amplia sonrisa, y que aún ad portas de la muerte desfiló una última vez entre multitudes, en medio del bullicio de quienes querían despedirse de esa auténtica y soñadora reina. Una mujer que hoy, 50 años después de su partida, sigue siendo noticia y construyendo historia cultural con la restauración de su monumento.
Recientemente, y luego de los desmanes que hubo en la ciudad por el paro nacional, el reconocido músico, pintor, artista plástico, escenógrafo y gestor cultural Diego Pombo la ha vuelto a hacer notar, como lo hiciera ella en sus años dorados.
En un proyecto de autogestión, en el que el artista caleño busca restaurar la escultura que él mismo elevó hace 13 años. Luego algunos ciudadanos le dieron un empujón al vestirla de negro, y ahora Pombo busca financiar el costo del traje definitivo de Jovita.
“Tras dos meses largos después del paro nacional, me contactó alguien de la Secretaría de Cultura para que restaurara la escultura, pues su ramo había sido doblado y su atuendo grafiteado. Sin embargo, me decía que debía estar en contacto con los muchachos del punto de resistencia que comenzó a funcionar allí, en el Parque de los Estudiantes. Algunos de ellos afirmaban que Jovita no debía estar ahí, y otros, que sí conocían su historia, defendían su lugar en el parque, pues a Jovita se le quería. Lo cierto es que después de dialogar con ellos, me dijeron: ‘Queremos resignificarla’, y me contaron lo que sentían, pues varios de sus amigos murieron allí”, dice el artista sobre las motivaciones que lo llevaron a proponer un nuevo diseño para la escultura de Jovita, y por la cual busca los cerca de 20 millones de pesos que costaría renovarla.
Por eso una serie de pinturas que varían en color y gráficas —estas últimas en coedición con el taller La Linterna—, se ha puesto a la venta en el Teatro Salamandra, el Hotel Intercontinental y el Patio del Museo, de La Tertulia, para conseguir el dinero.
Las pinturas y gráficas del artista Diego Pombo, estarán a la venta en el Teatro Salamandra, el Hotel Intercontinental y el Patio del Museo, de La Tertulia.
Pombo contó que aquella conversación con los jóvenes le permitió explicar por qué este emblemático personaje se había erigido en el parque y merecía seguir allí.
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“Daba la coincidencia de que Jovita había sido nombrada Reina de los Estudiantes en el año 70 y muchos ni siquiera conocían esa historia, no sabían, además, lo que ha escrito Javier Tafur, historiador, novelista y poeta, en la ‘Biografía de las Ilusiones’, y quien tiene fotos de Jovita acompañando a los estudiantes en los años 60 en sus manifestaciones. Por eso Jovita no solo era reina de Cali sino Reina de los Estudiantes”.
Pombo prometió presentar un nuevo boceto días después, y efectivamente fue así. La escultura que el artista plástico les propuso en ese momento, la misma que ahora busca financiar, está vestida de negro, pero en su traje tendrá varias estrellas doradas, lo que la hará lucir de gala y, a su vez, simbolizará la vida de los estudiantes idos, estrellas en el firmamento.
La Reina de los Estudiantes tendrá, además, un ramo de flores violetas y cerrará sus ojos para soñar con una Cali mejor, una ciudad unida.
“Los jóvenes quieren sentir que tienen esperanza de una vida mejor, de un futuro, por eso esta renovación. Finalmente les propuse que ese pedestal en el que va parada la Reina también tuviese un simbolismo, así que llevará lomos de libros en todo el cilindro. Allí estarán los nombres de los estudiantes que han caído en Cali y también los títulos de los libros más leídos por las nuevas generaciones, que han determinado la identidad de los caleños, como por ejemplo ‘Que viva la música’ o ‘El Atravesado’ de Andrés Caicedo, pero también ‘La María’, y los libros de Gardeazábal... lo que nos define culturalmente como región. Estéticamente se verá muy bella”.
Busco que sea incuestionable que es la escultura más bonita de Cali y que allí esté el motivo para impulsar el turismo y reconocer a nuestros estudiantes”,
Diego Pombo, Artista plástico.
La Reina, la “Multiplicadora de la alegría colectiva; ejemplo de optimismo, vencedora de los sueños y las quimeras; portadora del fuego ancestral de la locura; Prometeo callejero y sin cadenas; Quijote femenino aguijoneando la cordura; bondadosa, tierna, independiente, sola, abandonada, nómada citadina”, como la llamaron muchos en vida, y como está escrito en la Biografía de Tafur, es hoy un símbolo de unión, un homenaje a los caídos, un reconocimiento a los estudiantes y sobre todo un tributo a la soñadora y auténtica Jovita Feijóo.
Ahora Pombo, quien además de esa loable iniciativa para restaurar a nuestra emblemática y eterna Reina, se encuentra gestionando un proyecto para todos los interesados en la gráfica urbana en la región, remata diciendo:
“Estoy en diálogo con la directora de Bellas Artes, Consuelo Bravo, para mirar cómo podemos orientar un nuevo proyecto. Le propuse, a raíz de todo este fervor y entusiasmo que hay entre los jóvenes por realizar gráfica y muralismo urbano, que hiciéramos una estampatón. Sin embargo, la idea finalmente es buscar recursos para que ellos puedan aprender el arte y vivir de su trabajo, sería profesionalizarlo, es decir que tengan emprendimientos desde su arte, en esencia es eso”.
Lo cierto es que, de hacerse, la iniciativa cultural no terminaría solo ahí, pues el artista propone hacer una serie de exposiciones itinerantes de gráfica urbana, que en un futuro cercano llegue a países como Estados Unidos. Una manera de demostrarle al mundo y a los caleños mismos, que toda crisis trae una oportunidad de cambio.