En Colombia, el exceso de velocidad es la primera causa de fallecidos en siniestros viales, y los más afectados en las vías por este factor son los motociclistas, peatones y ciclistas. Ante este panorama, es necesario reconocer este comportamiento que cada vez es más común en las vías y como puede incidir entre la vida y la muerte.
Está comprobado que a medida que un vehículo aumenta la velocidad, los riesgos de muerte también aumenta exponencialmente al limitar la capacidad de reacción de los conductores, cerrando el margen de visión periférica, exigiendo mayor distancia para detener los vehículos y aumentando la fuerza de impacto que se liberan en un choque.
La Agencia Nacional de Seguridad Vial no es ajena a esta realidad, por eso ha destinado esfuerzos y estrategias enfocadas en promover la conducción a velocidades adecuadas en las vías del país.
Por ello ha sido fundamental trabajar con los departamentos para que integren soluciones y estrategias, actividades de pedagogía y sensibilización con autoridades locales, sectores, gremios e interesados. Recientemente la Agencia de Seguridad Vial puso a disposición de los usuarios una guía con elementos de pedagogía para que en diferentes escenarios se puedan apropiar actividades que visibilicen la vulnerabilidad humana, el riesgo de la velocidad y los mecanismos para reducir este factor en las vías del país.
Circular a velocidades adecuadas en los territorios no es un capricho, 10 k/h hacen la diferencia entre la vida y la muerte, el objetivo de la Agencia y que hemos estado fortaleciendo con las autoridades locales y tomadores de decisiones, es establecer límites de velocidad apropiados en las vías, que no interfieran con una circulación fluida, por el contrario que eviten incidentes, accidentes y siniestros, que preserven la vida por encima del afán.
Hemos adelantado políticas, metodologías, lineamientos, guías prácticas, trabajo con instituciones públicas, privadas ciudadanía, y academia para difundir el mensaje de la importancia de poner el tema del exceso de la velocidad en el centro de la conversación, como en su momento se hizo con la conducción en estado de embriaguez o con el uso adecuado del casco o cómo hemos venido haciendo desde hace ya dos años con el tema de la pandemia, atacar las causas de los siniestros es fundamental para lograr reducir los números que cada día cobran amigos y familiares en los hogares del país.
Promover cambios de comportamiento en la conducción es fundamental, no es una tarea fácil y hemos encontrado muchos retos, pero hemos comprobado que si las personas conocen los riesgos que implica el exceso de velocidad, son más receptivas a la hora de cambiar hábitos y de implementar acciones orientadas a transitar por las vías con seguridad vial, porque moverse a una velocidad adecuada hace la diferencia entre un choque simple o uno de consecuencias fatales.
Guía de velocidad: Guía Práctica de sensibilización en velocidad | ANSV