El 3 de septiembre de 1934, hace 90 años, nace el Fondo de Cultura Económica de México (FCE), un proyecto editorial que, en un principio, buscaba publicar libros de economía económicos, valga la redundancia, para estudiantes universitarios. Pero muy pronto, gracias a la visión humanista de su fundador, el economista Daniel Cossío Villegas, y los sucesivos directores del FCE, se convirtió en una editorial de culto, donde los textos más rigurosos de las ciencias sociales y ciencias duras, empezaron a convivir con la mejor literatura latinoamericana y universal.
Sus libros son joyas del pensamiento y la literatura, por lo que todo lector y lectora, que se precie de tal cosa, tiene al menos un ejemplar del FCE en su biblioteca.
En la actualidad, el FCE es una multinacional del libro, con cadenas de librerías y editoriales en Estados Unidos, España, Argentina, Chile, Guatemala, Perú, Ecuador y Colombia.
En nuestro país, el FCE cuenta ahora con seis sedes, dos en Bogotá, donde tiene el Centro Cultural Gabriel García Márquez, y otras en Cartagena, Medellín, Arauquita y, la más reciente de todas, que se inaugura precisamente esta tarde, a las 6:00 p. m., estará ubicada en la icónica Casa Obeso Mejía de Cali.
La librería del FCE en Cali llevará el nombre de María, en honor a la obra fundacional de la literatura colombiana, escrita por Jorge Isaacs.
“Queremos llegar a nuestras grandes ciudades capitales y regionales con una gran oferta literaria, pero también con un proyecto formativo que incluye talleres y actividades de mediación de lectura”, explicó Gabriela Roca, directora del FCE para Colombia.
La elección de Cali como sede de la nueva librería no fue casual. Roca destacó que esta ciudad ha sido reconocida en los últimos años como un escenario de encuentros artísticos que la posicionan como uno de los centros culturales más importantes de Colombia.
Además de su tradición en la literatura, Cali es también un referente en cine, música, danza, arte y festivales. Este dinamismo cultural, junto con el apoyo de la Fundación Obeso Mejía, fue determinante para que el FCE decidiera establecer su sexta librería en el país.
Por su parte, para el escritor mexicano Paco Ignacio Taibo II, director general del FCE, “esta librería dará acceso al catálogo del Fondo, hablamos de poner en circulación 10.000 obras, a los caleños, y continuaremos apoyando las estrategias de fomento a la lectura”.
La nueva sede estará ubicada en la histórica casa que perteneció a Antonio Obeso de Mendiola y Doña Luz Mejía de Obeso, y contará con un espacio de 78 metros cuadrados, ubicados en lo que fueron antiguamente las caballerizas de la propiedad. Este entorno, además, está cercano al icónico parque del Gato de Tejada y las Gatas del Río, y próximo al Museo La Tertulia, formando el nuevo triángulo cultural de Cali, que permitirá a los lectores acceder fácilmente y disfrutar de una experiencia única.
La Librería tendrá entre 8.000 y 10.000 ejemplares, que incluirán no solo libros del FCE, sino también de editoriales comerciales, independientes y universitarias. La curaduría ha sido pensada especialmente para el público caleño y todo el occidente colombiano, asegurando que el catálogo refleje los intereses y necesidades de la comunidad.
”Además de ofrecer libros, queremos que este sea un espacio de formación”, señaló Roca, quien añadió que la librería también albergará talleres de novela y cuento, así como clubes de lectura. Estos espacios estarán dirigidos a diferentes públicos, desde jóvenes lectores hasta adultos interesados en ampliar sus horizontes literarios.
El nombre de la librería, María, rinde homenaje a la icónica novela de Jorge Isaacs, una obra que ha trascendido generaciones y que sigue siendo una lectura obligatoria en los colegios dela región. “Queríamos un nombre que fuera en femenino y que dijera algo a los caleños y los vallunos”, explicó Roca.
Esta referencia no solo es un tributo a la obra, sino también una forma de conectarse con la historia y la identidad cultural del Valle del Cauca. En línea con esta iniciativa, el FCE planea editar una nueva versión de la novela en su colección popular para 2025, lo que reafirma el compromiso de la editorial con la preservación y difusión del patrimonio literario colombiano.