Una verdadera crisis que tiene al borde del cierre a varios teatros de la ciudad es la que vive el sector de las artes dramáticas caleño, por cuenta de los recortes en el presupuesto para la cultura y las dilaciones de la Administración Municipal para la entrega de los dineros públicos que la ley contempla para esta actividad artística.
Según indicaron varios directores de teatro de la ciudad, dos de los programas más importantes para la financiación de las artes dramáticas se encuentran estancados en medio de la burocracia de la Secretaría de Cultura y eso ha conducido a que la mayor parte de los teatros de Cali no reciban el dinero que les corresponde anualmente. Se trata del dinero del programa de Salas Concertadas y del recurso de la Ley de Espectáculos que, a pesar de que haya sido aprobado desde principios de este año, aún no ha sido desembolsado.
“Estamos en agosto y la Secretaría de Cultura no ha desembolsado el dinero de Salas Concertadas, no se ha contratado a ninguna sala. Y no es mucho el dinero que tiene la bolsa de ese programa, pero igual es un dinero importante para todos nosotros”, indicó Orlando Cajamarca, director del Teatro Esquina Latina.
Para participar en el programa de Salas Concertadas todos los teatros de la ciudad deben presentar un proyecto en el que se indique el número de eventos que realizan anualmente y, de acuerdo con una evaluación realizada por la Secretaría de Cultura, se le asigna a cada sala un recurso que está entre los $10 y los $30 millones.
Según Ingrid Pinzón, de Cali Teatro, esos proyectos fueron entregados por la mayor parte de salas teatrales en marzo de este año, sin embargo, el recurso aún no ha sido entregado.
“Y esto nos afecta mucho no solo por el dinero, sino porque la Secretaría exige un número de funciones pero como nos devuelven los proyectos y nos piden que los modifiquemos, eso significa que las funciones que hemos realizado ya no pueden hacer parte del nuevo proyecto”, agregó Ingrid.
Pero además de esta situación, otra grande dificultad se le ha venido a sumar a los artistas dedicados al teatro de la ciudad, y es que la Secretaría de Cultura, según varios testimonios, decidió que para otorgar recursos del programa de Salas Concertadas, los teatros deben también ser beneficiarios del mismo programa pero del Ministerio de Cultura. Es decir, si una sala caleña no resulta beneficiada por el Ministerio, automáticamente queda descalificada para participar por el recurso de Salas Concertadas de la Secretaría.
Es lo que le sucedió a la sala con mayor trayectoria histórica de la ciudad, el Teatro Experimental de Cali, que este año fue rechazada por el Ministerio de Cultura para acceder al recurso ofrecido en el programa de Salas Concertadas, por lo cual la Secretaría de Cultura tampoco le entregará ningún dinero de ese programa.
“Es absurdo lo que están haciendo con el TEC. ¿Cómo es posible que desde el Ministerio de Cultura nos hayan negado hacer parte de ese programa, cuando nosotros tenemos temporada todo el año, así como actividades pedagógicas para todo el mundo? Lo que están haciendo con el TEC es un asesinato, nos están matando”, dijo Jacqueline Vidal, directora del Teatro Experimental de Cali.
Beatriz Monsalve, del teatro Salamandra, explica que los problemas empezaron a surgir a partir del decreto 092 de 2017 que regula la contratación del Estado con entidades privadas sin ánimo de lucro.
“Hace 15 días el Ministerio de Cultura se reunió con la Secretaría y les aclaró que ese decreto tiene excepciones para las actividades artísticas, culturales y educativas, y que se puede hacer contratación directa con entidades como el Teatro Esquina Latina, el TEC, el Teatro Salamandra, La Máscara y muchos otros que tienen una larga trayectoria demostrada en la ciudad. Sin embargo, la Secretaría sigue pidiendo una serie de documentos y haciendo exigencias absurdas que retrasan los procesos y que a veces son imposibles de cumplir”, dijo Monsalve.
Lo mismo está ocurriendo con el recurso parafiscal que les corresponde a las salas de teatro gracias a la Ley de Espectáculos. Ese dinero lo gira la Nación a la Alcaldía para que esta lo entregue a las salas, pero en la ciudad, a pesar de que varios teatros ya tienen varios proyectos aprobados para este recurso, la Secretaría ha dilatado a tal punto su entrega, que aún no se ha hecho efectiva en muchos casos.
Pero la grave crisis que afecta al sector del Teatro en la ciudad es mucho más profunda y tiene que ver con el recorte que muchos sectores culturales han sufrido en Cali, una gran paradoja si se tiene en cuenta que justo este año la ciudad fue galardonada internacionalmente como el destino cultural más importante de América Latina.
El programa de Salas Concertadas, por ejemplo, el año pasado disponía de $415 millones y en 2019 dispone de $358 millones, mientras que el Festival de Teatro de Cali también tuvo un recorte de alrededor de $300 millones.
En una carta abierta enviada por el gremio del teatro de la ciudad, se afirma: “Avergüenza la apuesta que hace el municipio de Cali y su Secretaría de Cultura, con el apoyo que dispone para sus salas de teatro, frente a otras ciudades como Bogotá que destina una bolsa anual de 1.600.000.000 (mil seiscientos millones de pesos) y Medellín con una bolsa de 1.900.000.000 (mil novecientos millones de pesos), para el fortalecimiento de sus espacios teatrales y por ende para el estímulo y ampliación del impacto y beneficio de sus comunidades”. La carta está firmada por 15 espacios teatrales de la ciudad.
Una situación semejante a la que atraviesa el sector de las artes dramáticas en Cali hoy fue denunciada por El País a finales del año pasado y el recurso por el programa de Salas Concertadas fue entregado semanas después. “Es una lástima que Cali no tenga una política fuerte para el apoyo y el desarrollo de las artes escénicas y que durante esta administración no se haya logrado plasmar”, dijeron varios de los directores entrevistados.
Lo que dice la Secretaría
Aunque no fue posible contactar a la Secretaria de Cultura, Luz Adriana Betancourt, para este artículo, El País ha hablado con ella en otras oportunidades acerca del tema.
Betancourt ha sostenido siempre que, aunque entiende la preocupación del sector, la entrega de recursos depende de que el Departamento de Contratación de la Alcaldía verifique que se cumpla en cada caso con todos los requisitos necesarios y debido al alto número de contratos revisar los procesos se retardan.
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