Las escritoras caleñas Natalia y Juliana Vélez han extendido su amor por las letras y el arte colombiano alrededor del mundo, convirtiéndose en embajadoras culturales destacadas en tierras francesas, país donde fundaron su propia editorial, El Círculo, la cual se dedica a promover y respaldar el talento colombiano y latinoamericano en Francia.

Estas hermanas fueron introducidas en el mundo de la literatura y las artes con naturalidad, su padre fue pintor y estudió con los maestros Santiago y Juan Cárdenas. Esta temprana exposición a la cultura dejó una marca indeleble en ellas y sembró la semilla de su futura dedicación a las letras y las artes.

Las hermanas Natalia y Juliana son apasionadas por el cine y la literatura, ya que consideran que este es un arte que va de la mano con sus valores y profesiones en el campo del psicoanálisis y la filosofía. | Foto: El País

La semana pasada una de las hermanas Vélez, Natalia, estuvo de ruta por el Valle del Cauca, para fortalecer relaciones con instituciones culturales como el Museo Rayo, de Roldanillo, y para participar en conversatorios, en Cali, sobre la manera de apoyar a los talentos colombianos, para que estos hagan parte de una red artística más grande y su talento pueda darse a conocer en alrededor del mundo.

“El Valle del Cauca y el Cauca tienen un gran potencial artístico, el cual, muchas veces, no es conocido porque no se visibilizan las instituciones que apoyan a los artistas. Por eso, con la editorial El Círculo, aprovechamos nuestro viaje a Cali, para visitar los templos del arte del departamento, y buscar la manera de apoyar y ser una ventana para mostrar el talento”, cuenta Natalia.

El objetivo principal de El Círculo es construir un puente de intercambio cultural y artístico entre estas dos regiones, fortaleciendo los lazos culturales y promoviendo la creatividad latinoamericana en el escenario internacional.

Uno de los proyectos más notables de estas caleñas es la revista Ojo Vulgar, una serie de publicaciones que hace un tránsito por la narrativa visual contemporánea, al contar historias a través de las imágenes.

“Esta, además de ser una revista, es una plataforma de intercambio cultural, que también busca visibilizar la forma como el arte latinoamericano ha influido en espacios internacionales como Europa, recordando la importancia de estos artistas y con esto abrir el telón para presentar a los talentos emergentes”, dice Natalia.

Ojo Vulgar nace en medio de encuentros en los cafés de París, donde un grupo de amigos, entre ellos Natalia y Juliana, empezaron a realizar una serie de proyectos enfocados en el arte, y así, poco a poco, se conformó un equipo para empezar a darle forma a este proyecto.

“Nos reuníamos con amigos para conversar, tomar café y hacer tertulias de literatura y arte, que es lo que nos apasiona, y viendo la necesidad de visibilización que se necesita en el arte colombiano, iniciamos este proyecto”, recuerda Natalia, quien es psicoanalista y apasionada por la escritura, en especial de poemas. El nombre de la revista, Ojo Vulgar, es una referencia al surrealismo, que busca expresar el pensamiento.

Un ojo fisgón

“Se refiere a algo que puede ser hermoso como lo es un ojo; pero, va más allá porque es fisgón, busca más allá de lo que está a simple vista”, explica la caleña, quien este año, junto a su hermana, hicieron parte de la Fiesta del Libro y la Cultura de Medellín, donde el tema central fueron las mujeres, un evento en el que se le rindió homenaje a la importancia de las voces femeninas en la literatura. Además de su aporte en el campo cultural, una de las preguntas que surgen frente a este proyecto editorial, es ¿por qué apostarle al papel y a escritos en español y francés en la era digital? Un cuestionamiento que Natalia confiesa está entre sus interrogantes favoritos, porque le permite traer a la actualidad las remembranzas de sus tardes en Cali, junto a su hermana, admirando la gran biblioteca de su casa, de la cual podían tomar cualquier libro, en especial de cultura y conocer un mundo completamente nuevo para ellas.

El equipo de Ojo Vulgar Alexander Ortega Marín, Juliana Vélez Loaiza, Fernanda Loaiza, (artista invitado de la edición de lanzamiento), Natalia Vélez Loaiza y Sebastián Paulin. | Foto: El País

La poesía del papel

“El papel, más allá de ser un medio muy poético, en este tiempo vuelve a ser una manera de crear una contracultura, que va muy de la mano con la revista. Además, sumado a lo anterior, se trata de ver de cerca esta calidad artística, de tener el arte en las manos y poderlo palpar, eso es especial”, manifiesta Natalia, quien desde pequeña se destacó en el mundo de las artes como bailarina clásica. Su talento la llevó a estudiar danza en el extranjero y a formar parte de reconocidas compañías de ballet en Boston y Nueva York.

Con el objetivo de profesionalizarse y de crecer, cada una en su ciencia favorita, Natalia y Juliana, sicoanalista y filósofa, respectivamente, viajaron a Europa, donde la pasión por el arte las acompañó, y siguió creciendo con ellas. Ahora sueñan con seguir apostando por los talentos emergentes y por reconocer a artistas colombianos que marcarán su historia. “Estamos haciendo alianzas con instituciones de arte, como el Museo Rayo, para visibilizar tanto a los artistas como a las personas que trabajan en el mundo del arte y la cultura, porque se encuentran talentos impresionantes, pero hace falta ese reflector que ayude a llamar la atención”, expresa Natalia.