Como dice la canción de Jarabe de Palo: “Bonito, todo me parece bonito. Bonita mañana, bonito lugar. Bonita la cama, que bien se ve el mar. Bonito es el día que acaba de empezar”... un tema musical que llena de positivismo a las personas que lo escuchan, y así como esta, hay muchas melodías que llenan de pensamientos positivos cada nuevo día.
“Lo primero que debe hacer una persona es ser consciente de la música que consume. Debe saber escuchar, pero la mayoría no sabe hacerlo y eso puede ser contraproducente, porque la música puede transformar la realidad de una persona sin darse cuenta”, comenta Martín Ómar Jaramillo Potes, licenciado en música. Así de poderosa y peligrosa es.
Jaramillo hace la salvedad, “cuando usted es consciente de lo que consume, con apreciación musical, ninguna nota ni vibración le va a hacer daño cuando usted sabe escuchar, es consciente de lo que escucha y puede escoger la música que le beneficie”.
En su libro, ‘Neuromúsica’, señala este autor que “la música es imprescindible en la vida de las personas, porque es considerada un lenguaje universal que une a los seres humanos, está comprobado que desde el vientre materno podemos ser estimulados por esta”.
Este estudioso de los efectos positivos de música se respalda científicamente en Jordi Josep, Esteban Cols, Facundo Manes y Robert Satorre, “son neurocientíficos que vienen diciéndole al mundo que hay que saberla, escuchar, para utilizar los beneficios. Ellos dicen que cuando usted aprende a escuchar música, de forma consciente y crítica, desde un ámbito terapéutico y emocional, y escucha la música que le gusta y le alegra, puede bajar los niveles de estrés y ansiedad, y cuando eso pasa, su cuerpo toma defensas, por lo tanto, el sistema inmunológico se ve beneficiado. También sirve para bajar el dolor físico, porque la música estimula las endorfinas.
Diversos estudios concluyen que al escuchar música, el cerebro libera sustancias químicas como la oxitocina, la endorfina, la dopamina y la serotonina, llamadas hormonas de la felicidad.
El Instituto Francés de la Ansiedad y el Estrés en París ha comprobado que una de las actividades que pueden realizar las personas para mejorar su calidad de vida es escuchar música; no solo brinda la oportunidad de tener momentos placenteros, además, cumple un efecto terapéutico.
Por ejemplo, los pacientes con Alzheimer recuperan algunos de sus recuerdos a través de la música, la cual activa una amplia gama de regiones cerebrales implicadas en la memoria, y también en la emoción, el movimiento, la sensibilidad a la recompensa, según Kelly Jakubowski, profesora asociada al departamento de música de la Universidad de Durham.
Si bien, alguien con Alzheimer no puede identificar a un familiar, sí puede tararear una canción que marcó una etapa especial en su vida. Jakubowski explica: “Escuchamos la misma música una y otra vez, muchas más veces de las que leemos el mismo libro o vemos la misma película. Esta sobreexposición a la misma canción muchas veces puede reforzar el rastro en la memoria”.
Asimismo, según Jakubowski: “Las investigaciones psicológicas demuestran que los asuntos emocionales se recuerdan mejor que los no emocionales, y que distintas partes del cerebro se encienden al escuchar una canción. Además del córtex auditivo (área de la corteza cerebral que recibe, gestiona, elabora y entiende los estímulos auditivos), también se activan áreas del cerebro relacionadas con la emoción y con las regiones motoras: La gente recuerda los movimientos y quiere bailar con ellos”.
En Colombia, un país donde en los últimos 11 años se han quitado la vida 10.108 personas, entre los 15 y los 29 años por problemas de salud mental, según una investigación del Politécnico Grancolombiano, y donde solo hay 2,5 psiquiatras por cada 100.000 habitantes, y entre los años 2018 y 2023 el Ministerio de Salud solo ha destinado el 1 % de su presupuesto a esas causas, son muchas las personas que deben autoterapiarse o curarse con medicinas alternativas, y la música es, muchas veces, un salvavidas para la mente.
Así como ‘Bonito’, la canción de Jarabe de Palo y cantada por la inconfundible voz del español Pau Donés, es un himno con esta frase “Bonito, todo me parece bonito” del mismo tema. Esta composición se lanzó el 31 de marzo de 2003, más de 20 años y aún hoy genera las mismas emociones en sus oyentes; el propio Pau explicaba: “Con ‘Bonito’ queremos demostrar que vale la pena vivir en este mundo”, y sí que lo vale por esta canción que ha salvado los días grises de muchas personas.
Otras canciones como La Negra Tiene Tumbao, interpretada por Celia Cruz, y que combina salsa, reggae y hip hop vibrantes, son mezclas poderosas para levantar el ánimo.
Un tema colombiano con ese ‘power’ es el vallenato La Gota Fría, que tiene raíces en 1938, cuando Emiliano Zuleta Baquero la compuso contra su rival musical, Lorenzo Morales, pero fue en 1993, cuando Vives fusionó acordeón, caja y guacharaca con baterías, guitarras y bajo, que se convirtió en una píldora para la felicidad.
Así, como píldoras para la felicidad, define algunas canciones Jaramillo Potes, quien dice, al igual que Ismael Miranda: ‘Me curo con rumba’, o mejor, con salsa: “A mí, a mis 60 años, me ha servido más la música salsa que la clásica. La clásica no tiene clave, no tiene sabor, ni azúcar, mientras la salsa tiene jazz, mambo, son, chachachá. A diario escojo tres canciones o píldoras y las voy variando. Hoy tomé: Necesito un Abrazo, de Hansel Camacho; Ahora Sí, de la Sonora Ponceña, y Mis Promesas son Sí, Amén, de Papo Rivera. Escucho música que me edifique, tengo en cuenta el arreglo, la sonoridad de los instrumentos, los adornos, las transiciones, y que la letra alimente sus pensamientos”.
¿Y a usted, qué música lo sana?
Neuromúsico del Pacífico
Martín Omar Jaramillo Potes. Neuromúsico práctico, arreglista, director musical y maestro, principalmente en apreciación musical. Nació el 1 de enero de 1965, en el Pacífico colombiano. En 1990 se graduó como Licienciado de Música en la Universidad Tecnológica de Pereira, formado principalmente en música clásica. Es docente de música y de apreciación musical en Buenaventura, en la I. E. Simón Bolívar y en la Universidad del Valle. Pianista y arreglista de la orquesta Milenio de Buenaventura, de la cual es fundador.
Canciones con efecto positivo, según la neurociencia
Don’t Stop Me Now, una de las canciones más conocidas de Queen, es según la neurociencia, la más alegre que existe.
‘What a wonderful world’, de Louis Armstrong, la canción más motivadora del mundo, según Google.
En el top diez de los neurocientíficos están también: Dancing Queen – Abba; Good Vibrations – The Beach Boys; Uptown Girl – Billy Joel; Eye Of The Tiger – Survivor; I’m a Believer – The Monkees; Girls Just Wanna Have Fun – Cyndi Lauper; Livin’ On A Prayer – Bon Jovi; I Will Survive – Gloria Gaynor, y Walking on Sunshine – Katrina & The Waves.
Salsa motivadora
Canción Para los Enfermos: Rubén Blades, Carlos Vives. Vivo Feliz, Tito Rojas. Si Me Caigo, Me Levanto, Sammy Marrero y su Orquesta. Bajo la Tormenta, Sergio George’s y Salsa Giants. Sonríe, Luis Enrique. Caminando, Rubén Blades.
Reggae relajante
Felicidad, Gondwana. Redemption Song, de Bob Marley.
Un estudio del Hospital Presbiteriano de Nueva York demostró que hay canciones que salvan vidas, porque su ritmo está marcado entre los 100 y los 120 bytes por minuto, un ritmo ideal para realizar la técnica de reanimación cardiopulmonar (RCP). Entre otras: Macarena, de Los del Rïo; Crazy in love – Beyoncé y Jay-Z; Just Dance – Lady Gaga y Man in the Mirror - Michael Jackson.
Música clásica para mejorar el ánimo:
‘Concierto para piano n.º 21′, de Wolfgang Amadeus Mozart. ‘Serenata para cuerdas en mi mayor’, de Antonín Dvorák. ‘Adagio for Strings’, de Samuel Barber. ‘Clair de Lune’, de Claude Debussy. ‘El Cisne’, de Camille Saint-Saëns.
Según estudio realizado por la Universidad de Pensilvania bajan la ansiedad: ‘Weightless’, de la banda Marconi Union. Someone Like You’ – Adele: ideal para relajarse y encontrar paz interior. Happy (Pharrell Williams): para darse motivación cada nuevo día. Para amar bonito: Spirit on the Water, de Bob Dylan.
Crean conciencia de salud mental: René, de Residente. Estamos Bien, de Bad Bunny. Remamos, Kany García y Natalia Lafourcade. Mientras me Curo del Cora, Karol G. ‘1-800-273-8255′, Logic, Juanes, Alessia Cara & Khalid-