Con lágrimas y pidiendo perdón a los hinchas, así terminó el ciclo de Adrián Ramos con el América de Cali, este domingo, en medio de la suspendida final de la Copa BetPlay ante Nacional. Los desmanes de los hinchas obligaron a que el partido se parara a los 84 minutos.
El ariete caucano, que jugaba su último partido con la camiseta roja, tenía la esperanza de poder remontarle la serie a Nacional ante 37.000 hinchas en el estadio Pascual Guerrero. Los verdolagas habían ganado 3-1 el pasado jueves en el Atanasio Girardot.
Impulsado por su gente, América trató de conseguir los dos goles para igualar al menos la serie e ir a penales, pero no tuvo claridad a la hora de rematar al arco defendido por David Ospina.
Ramos ingresó en el segundo tiempo para darle otra cara al equipo, pero a pesar de sus esfuerzos tampoco pudo hacer mucho.
En los minutos finales, los hinchas generaron desmanes e ingresaron al terreno de juego en reclamo a sus jugadores, por lo que el partido tuvo que ser interrumpido.
Con lágrimas y muy apenado por la situación, Adrián Ramos dijo al final del juego: “Queríamos que esto terminara diferente, pero no se pudo, disculpas a los hinchas”.
Esta, sin duda, fue una triste manera de despedir a un emblema como Ramos, bicampeón con América en Liga (2008 y 2020) y uno de los goleadores históricos de la institución, con 105 conquistas.
Pese a este lamentable suceso, Ramos seguirá siendo uno de los futbolistas más querido de la parcial americana, y uno de los más respetados del fútbol colombiano.
Todavía no es claro si Ramos seguirá jugando en otro equipo. En caso de hacerlo, tendría que ser en uno del exterior, ya que él mismo indicó que no se pondrá la camiseta de otro club en Colombia.