Argentina, que estaba contra las cuerdas tras caer en su caótico debut en el torneo olímpico masculino de fútbol, evitó por ahora el desastre al imponerse 3-1 a Irak, este sábado en Lyon, en la segunda jornada del grupo B.
Thiago Almada firmó el primer tanto de la Albiceleste en el minuto 13, de volea tras recibir de Julián Álvarez, pero en el descuento de la primera mitad (45+5) los iraquíes equilibraron el marcador por medio de Aymen Hussein.
Argentina volvió a ponerse por delante en el 62, cuando el recién ingresado Luciano Gondou marcó de cabeza, y la sentencia definitiva la firmó Ezequiel Fernández en el 85, con un soberbio tanto logrado con un golpeo con la zurda desde la frontal del área.
Estos tres primeros puntos permiten al equipo entrenado por Javier Mascherano seguir vivo en la competición, alcanzar en la tabla a los iraquíes y llegar con ánimos renovados a la tercera y definitiva fecha, en la que se medirá a Ucrania el martes de la nueva semana.
La apertura de la segunda jornada del Grupo B se llevó a cabo sin mayores incidentes, tras el caótico debut entre argentinos y marroquíes el miércoles en Saint-Étienne.
El juego, que se saldó con derrota 2-1 de los albicelestes, debió ser interrumpido por invasión de aficionados de Marruecos y se reanudó dos horas después.
En el estadio de Lyon, al que asistieron unas 20.000 personas, un tercio de la capacidad de 60.000 espectadores, un pequeño grupo de hinchas pitaron el himno argentino y abuchearon, en el inicio del juego, cuando la pelota era tocada por algún jugador de Mascherano.
La rivalidad Francia-Argentina, reavivada recientemente por un cántico racista entonado por jugadores de la Albiceleste absoluta tras ganar la Copa América en Estados Unidos, podría tener un nuevo episodio próximamente ya que si el equipo sudamericano se clasifica como segundo y los anfitriones cumplen los pronósticos y ganan el grupo A, ambas selecciones se verían las caras en cuartos de final.
Con información de AFP