Por Juan Carlos Pamo Sánchez - Reportero de El País
El arbitraje colombiano será protagonista este sábado en la tarde cuando se dispute la gran final de la Copa Libertadores de América entre Fluminense de Brasil y Boca Juniors de Argentina.
Roldán, de 43 años e internacional desde 2008, dirigirá su cuarta final de la Copa Libertadores, el torneo de clubes más importante de Suramérica.
En su carrera profesional, el colombiano es el árbitro con más juegos en la historia de la Copa Libertadores (116). El primero fue en la edición 2008 del torneo, cuando debutó en un partido entre Funda UAM de Venezuela y Atlas de México.
Desde ese momento, Wílmar ha tenido una dilatada carrera con presencias en los torneos internacionales más importante del fútbol, como mundiales y competencias continentales.
“Wílmar es de los pocos árbitros que en la actualidad en Colombia y Suramérica mantiene el postulado de la autoridad en el fútbol. Se hace respetar y sabe conducir los partidos, de acuerdo con la circunstancia que se presenten”, comentó José Joaquín Torres, exárbitro vallecaucano que pitó la semifinal del Mundial de Estados Unidos 1994.
Roldán estará secundado por sus compatriotas Alexander Guzmán y Dionisio Ruiz. La terna arbitral la completan: Andrés Rojas (cuarto árbitro) y Wílmar Navarro (quinto árbitro).
“Roldán se encuentra un momento estelar de su carrera, está recibiendo lo que sembró a los largo de los años. La experiencia recogida le ha servido para dirigir con acierto y con suma facilidad los partidos sin importar el nivel”, apuntó José Borda, otro exárbitro profesional y que ahora funge como analista en medios de comunicación.
“En el tema de las virtudes y defectos que tiene Wílmar, son aspectos muy claros. Hay que destacar que es un gran profesional en una actividad que en este país no es profesional. Es una persona que se prepara física y teóricamente de forma ejemplar, es algo que lo ha hecho destacarse a nivel internacional”, indicó Wílmer Barahona, quien fue árbitro profesional por el Valle del Cauca.
El árbitro nacido en el municipio de Remedios se confiesa ser un admirador de la Copa Libertadores, torneo en el que ha escrito su propia historia.
“Yo soy ‘fan’ de la Copa Libertadores, le tengo un cariño especial y diría que un amor grande a este torneo. Este certamen tiene una gran mística y todos los que alguna vez hemos estado en una cancha sabemos que es algo que atrapa”, le reconoció Wílmar a El País hace un poco más de un año, cuando celebró el centenar de partidos dirigidos en la Libertadores.
“Son muchos partidos en la Copa, pero los que más recuerdo son sin duda las tres finales que he dirigido. En la primera final que dirigí en 2012, entre Corinthians y Boca Juniors, entendí la magnitud que tiene la Libertadores. Tengo una anécdota de ese juego, porque rumbo al estadio Pacaembú de Sao Paulo nos tocó caminar como siete cuadras. Cuando iba en el carro acompañado de la escolta policial, decía: ‘la Copa Libertadores es maravillosa’. Adentro había 40 mil hinchas, pero afuera eran como dos millones”.
“El hecho de que a Wílmar Roldán lo elijan los jugadores como el mejor árbitro del fútbol es sinónimo de que para nosotros los futbolistas tienen de él una imagen de respeto, autoridad, de seguridad y de credibilidad. Es merecido que en todos estos años se haya mantenido con un alto nivel. Desde muy joven ya se veía que iba a ser un árbitro de talla internacional”, indicó Camilo Ayala, capitán del Deportivo Pasto.
Prepotencia, su lado negativo
Pero como todo no es color de rosa, como ser humano Wílmar Roldán tiene defectos. Quienes han seguido su carrera no dudan en afirmar que su aspecto negativo es la prepotencia que a veces transmite dentro y fuera de los campos.
“Su defecto principal es que es muy petulante, eso se refleja en lo social y a veces dentro de la cancha, pero es algo de él como humano”, añadió Barahona.
En ese misma línea, Borda señaló que “entre sus defectos están que es muy sobrador. Dependiendo del partido que pite, se relaja demasiado y por eso se equivoca, no permite que los jugadores le hablen, no le hace caso al VAR, precisamente porque cree siempre tener la razón”.
Wílmar Roldán espera salir avante en el duelo de la final de la Copa y que su actuación esté a la altura del compromiso.
Datos
Corinthians y Boca Juniors (2012), Atlético Mineiro y Olimpia (2013), y Nacional y San Lorenzo (2014) fueron las tres finales de Copa que pitó Wílmar Roldán.
Por dirigir la final de este sábado, Roldán se ganará 20 mil dólares (80 millones de pesos). Los asistentes y el líder del VAR ganarán unos 16.000 dólares