El equipo de Boyacá tendrá que jugar desde el 2017 en la B, tras trece temporadas en primera división. Pasto salvó la categoría.
Con su derrota en la fecha 19 ante Medellín y el triunfo del Deportivo Pasto, Boyacá Chicó perdió este sábado la categoría en la Liga Águila y desde el 2017 regresará a la segunda división luego de 13 exitosos años en la A. Al igual que los malos estudiantes el Chicó se puso las pilas tarde para salvar el año, a pesar de haber tenido una seguidilla de tres partidos seguidos ganados y tener un buen partido ante el Medellín en el Atanasio Girardot, los ajedrezados perdieron la categoría de la primera división tras el triunfo 1 por 0 del Deportivo Pasto ante Fortaleza en el Estadio Libertad de la capital de Nariño. La llegada del uruguayo Nelson Olveira al banquillo bolyacense, prolongo la esperanza ajedrezada de permanecer en la A, pero con los resultados de la fecha 19, quedó con 114 unidades en la penúltima posición de la tabla del descenso, 4 unidades por debajo de Jaguares y 6 por detrás de Pasto, a falta de una sola jornada para finalizar la fase regular. La historia del Boyacá Chicó, el equipo de Eduardo Pimentel, inició en el 2002 en la segunda división y rápidamente ascendió en diciembre de 2003 cuando venció en la final a los Pumas de Casanare y desde el 2004 siempre fue protagonista en primera. Los boyacenses, que ascendieron en Bogotá para la temporada 2004, en el 2005 se radicaron en Tunja, donde hicieron carrera y se coronaron campeones en el 2008, cuando también participaron en su primera Copa Libertadores, torneo al que regresaron en 2009. Grandes jugadores se formaron o pasaron por la casa ajedrezada. Wason Rentería fue su principal figura y carta para mostrar, pasos que luego siguió Marco Pérez y que compartió con la figura del argentino Miguel Caneo, uno de los artífices del título del 2008, de la mano del entrenador Alberto Gamero. Con Gamero en el banco técnico, Chicó vivió su época más exitosa en la primera división, con presencia en las Copas Libertadores de 2008 y 2009, con ese título sobre el América de Cali en el 2008 y protagonismo permanente en los cuadrangulares, así como el subtítulo de la Copa Colombia en 2011. El jugador emblemático ha sido Juan Alejandro Ruanitas Mahecha, quien suma más de 300 partidos con el club, seguido por Edwin Móbil y Juan Galicia. El club, además, se caracterizó por contratar jugadores de países remotos como Austria, Holanda, Japón y Camerún. Con esa rica historia de 13 años en la primera división, el Boyacá Chicó será uno de los nuevos integrantes en el Torneo Águila para el 2017, junto a Fortaleza, que fue el primer onceno en descender. Ahora quedan pendientes los dos clubes que ocupen sus lugares en la primera categoría, que saldrán de los dos cuadrangular que se están disputando en el Torneo Águila 2016.