El técnico del Real Madrid, Carlo Ancelotti, aseguró que ganar la Copa del Rey el sábado frente a Osasuna supondría “cerrar un círculo muy bonito”, ganando en dos años todos los trofeos posibles.
“Jugar una final siempre ilusiona”, aseguró Ancelotti este viernes en la rueda de prensa previa a la final que se disputará en el estadio de La Cartuja sevillano.
“Estamos centrados en el partido de mañana (sábado) que puede cerrar un círculo muy bonito de ganar en dos temporadas todo lo que era posible ganar a nivel de clubes”, añadió el técnico italiano.
Ancelotti aseguró que siempre afronta con ilusión las finales porque “siempre pienso antes de una final que puede ser la última y pido a los jugadores disfrutar porque son partidos especiales”.
“Va a ser un partido igualado, competido, contra un rival muy organizado. Es un partido importante para ellos”, recordó Ancelotti.
Una victoria supondría, además, una inyección de moral de cara al partido de ida de semifinales de la Champions contra el Manchester City el martes, aunque rechazó que estén mirando de reojo a este importante encuentro.
“Mañana saldremos sin pensar en el día después. Saldremos con toda la energía del mundo para ganar otro título”, dijo Ancelotti, quien admitió que tiene la duda de Luka Modric, que acaba de superar una lesión muscular.
“Ayer (jueves) se entrenó muy bien, sin problemas, hoy lo va a hacer de nuevo y junto con él evaluaremos si meterlo de inicio. Si se siente bien, va a jugar”, afirmó.
“Si el jugador no se siente cómodo, no lo vamos a arriesgar; si se siente cómodo, va a jugar”, insistió Ancelotti.
El técnico merengue también negó que su futuro pueda depender de estos dos próximos encuentros de Copa y Champions.
“Me juego la final de la Copa del Rey y una semifinal, no me juego la vida, solo la final de Copa del Rey, que es muy importante, y después hay una semifinal que está claro que sería mejor prepararla con una Copa en casa”, dijo.
“Mi futuro está muy claro, mi contrato va hasta junio de 2024, no mañana”, aseguró.
Real busca salvar la temporada
El Real Madrid buscará el sábado en la final de la Copa del Rey, un trofeo que no gana desde hace casi una década frente a un Osasuna que quiere hacer historia con su primer título.
El equipo blanco ganó por última vez la Copa en 2014, precisamente con Carlo Ancelotti en el banquillo, y tratará de repetir la gesta el sábado en el estadio sevillano de La Cartuja.
El trofeo se ha convertido, junto a la Champions, en un objetivo prioritario de los merengues para salvar la temporada en la que el Barcelona tiene ya el título liguero en la mano, que podría ganar ya el próximo fin de semana.
Con información de la AFP.