La futbolista Carolina Arias Vidal, de la Escuela Carlos Sarmiento Lora y que ha estado en la Selección Colombia Femenina disputando los Mundiales juvenil y mayores, empacó sus maletas y se fue para Houston becada a estudiar y seguir con su carrera deportiva.
La futbolista Carolina Arias Vidal, de la Escuela Carlos Sarmiento Lora y que ha estado en la Selección Colombia Femenina disputando los Mundiales juvenil y mayores, empacó sus maletas y se fue para Houston becada a estudiar y seguir con su carrera deportiva.De pequeña, cuando tenía 11 años, a Carolina Arias Vidal sus compañeras de la Escuela Sarmiento le decían zancudo, porque era muy delgada y se movía bastante en la cancha.Sin embargo, la niña, con los consejos alimentarios de un amigo de la familia que tiene un gimnasio, y las indicaciones futbolísticas del entrenador Mario Moreno, fue ganando peso y cada día demostraba más sus condiciones con la pelota en los pies.Ella, a diferencia de la mayoría de las niñas de su edad, cambió el balón por una muñeca, y se divertía con otros muchachitos en las calles del barrio Alirio Mora Beltrán, donde, según su mamá, María Isabel Vidal, se perdía en las tardes, no comía por ir a la cancha, los niños querían jugar con ella, sus amigos no eran mujeres porque no le gustaba el chisme, el balón siempre lo puso ella, jamás se lo dejó quitar y brincaba hasta el cielo cuando anotaba un gol. Ahora, después de haber sido llamada a varias convocatorias de la Selección Colombia Femenina, haber sido campeona en los Juegos Bolivarianos del 2009 en Sucre (Bolivia), subcampeona en la Copa América de Ecuador 2010 (alcanzando tiquete a Juegos Olímpicos, Juegos Panamericanos y al certamen orbital de mayores 2011), subcampeona en el Suramericano 2010 en Bucaramanga (logrando cupo al Mundial Sub 20), el Mundial Sub 17 de Alemania en el 2010, la zancudo voló bien alto.Gracias a un seguimiento que le hicieron emisarios de Estados Unidos en el Mundial Sub 20 de Alemania, Arias va a terminar en la Laramie County University, de Texas, sus estudios de Profesional en Deporte y Educación Física, que empezó en la Escuela Nacional del Deporte.Carolina pasó los chequeos médicos el pasado jueves y al día siguiente hizo su primer entrenamiento con el equipo de la universidad. Ella tuvo oferta de otras entidades de educación superior, entre ellas una militar, pero escogió la de Houston porque le dan nivelación de un año para perfeccionar su manejo del idioma inglés. Allí contará con todas las garantías para desempeñar sus dos roles, eso sí, con el espaldarazo de la Escuela Sarmiento Lora, que la muestra como sus principales estandartes en el balompié femenino.Por ello, Carolina agradece el apoyo que siempre recibió de María Clara Naranjo, presidenta de la Escuela Sarmiento y a los técnicos Mario Moreno y John Albert Ortiz, quienes confiaron en sus condiciones.Su maleta se fue cargada de guayos, zapatos y jeans, además de unos cds de salsa de Gilberto Santa Rosa, su cantante preferido; pero ya le pidió a su padre, Mario Vidal, que le mande café y manteca de oso para untarse y endurecer las articulaciones, este último un secreto que le enseñó su abuela materna.