El esprínter neerlandés Fabio Jakobsen (23 años), gravemente lesionado tras una caída en la llegada de la primera etapa de la Vuelta a Polonia, el pasado 5 de agosto, se felicitó de seguir con vida este martes en un comunicado de su equipo, el Deceuninck-Quick Step.

"Los médicos y enfermeras en Katowice me salvaron la vida y les estoy agradecido. Fui operado durante cinco horas y eso me dio una oportunidad de seguir vivo. Fue un momento difícil para mí en cuidados intensivos porque tenía miedo de no sobrevivir", declaró Jakobsen, que sufrió muchas fracturas en la cara y el cráneo.

El pasado miércoles, Jakobsen se marchó de Polonia al hospital de Leiden, en Países Bajos, antes de poder volver a casa finalmente. "Tengo que descansar mucho luego de esta gran conmoción. En las próximas semanas y meses tendré que someterme a varias operaciones y otros tratamientos por mis lesiones en la cara".

"Estoy muy agradecido de estar vivo. Puedo mirar lentamente al futuro y lucharé por recuperarme", concluyó el ciclista.

Jakobsen sufrió una escalofriante caída el 5 de agosto poco antes de la línea de meta de la primera etapa de la Vuelta a Polonia. Vigente campeón de Países Bajos, fue cerrado por su compatriota Dylan Groenewegen (Jumbo) en un esprint a toda velocidad y salió despedido por encima de las vallas de seguridad.