En un año inolvidable para el deporte y el ciclismo colombiano, donde se incluye un título de Tour de Francia para Egan Bernal, el nombre de otro joven pedalista se coló en la mente de los colombianos con buenas actuaciones.

Sergio Andrés Higuita García, de 22 años, se posicionó, en su primera temporada en el World Tour con el Education First, como la gran promesa del pedal cafetero.

Los que lo conocen, sobre todo quien fuera su entrenador por tres años en el Manzana Postobón, Luis Fernando Saldarriaga, ya hablaban de ‘René’ como un gran prospecto, cosa que un contundente triunfo de etapa en la Vuelta a España y un cuarto puesto en el Mundial de Ruta sub -23 se encargaron de confirmar.

‘René’ contó detalles de su gran año, la actualidad del ciclismo colombiano y las metas venideras.

¿Qué es lo mejor que le deja la primera temporada en el World Tour a Sergio Higuita?
Me deja muy buenos recuerdos, de mucha felicidad y de perseverancia. Fue un año muy positivo por los sueños que cumplí. Mi primer sueño era estar en un equipo europeo, luego en una escuadra World Tour y luego hacer una gran vuelta. Todos los cumplí.

¿Cuál fue el momento más emocionante de la temporada?
Definitivamente mi triunfo de etapa en La Vuelta a España. Sentir que lideraba una etapa en solitario y que podía ganar. Sentir la adrenalina de que me iban a alcanzar y no me podía dejar. Son sensaciones únicas.

¿En el Mundial de Yorkshire le quedó el sinsabor de no hacer podio?

Claro, sobre todo por ser un Mundial muy difícil que no se acomodaba a mis características.

¿Cómo fueron sus inicios en el ciclismo?
Empiezo a entrenar a los 13 años con Efraín Domínguez en el velódromo Martín Emilio Rodríguez. Ya con él me encamino en la parte técnica, luego conozco a Fernando (padre) y Luis Fernando Saldarriaga (hijo). Con este último entreno desde los 15 hasta el año pasado, a mis 21. Él me brindó muchos conocimientos en la parte técnica que me sirvieron este año.

Él le puso el apodo de René, ¿le gusta?
Sí, definitivamente. Sé que es un apodo de cariño, que se da por la Rana René y por René Higuita.

En el Mundial demostró sus habilidades como clasicómano, ¿prefiere ser un corredor de grandes vueltas o clasicómanos?
Me veo como alguien que puede hacer bien las dos cosas. Como puedo hacer las clásicas, también puedo hacer grandes vueltas. Habrá años en que esté más enfocado en clásicas y en ganar etapas y otros en que luche más por la general de las carreras. Todo dependerá de mi madurez.

¿Cuál identifica como su mayor fortaleza y en qué debe mejorar?
Mi fortaleza es que sé correr y sé identificar los momentos de carrera. Mi sprint al final es muy explosivo. Hay muchas cosas por mejorar, sobre todo que me falta experiencia en varias ocasiones de carrera y en conocerme a mí mismo físicamente.

¿Qué tan importantes han sido Daniel Martínez y Rigoberto Urán en su llegada al Education?
Han sido muy importantes. Todos los compañeros son muy profesionales y grandes personas, pero tener dos compañeros colombianos es otra cosa. Daniel es un corredor joven como yo, con mucho talento, que tiene la misma de perseguir sus sueños. ‘Rigo’, por su parte, es un jefe de filas muy experimentado que ha corrido las carreras más importantes.

¿Cómo fue eso del “güevón, pilas pues que vos ganás una etapa, güevón” de Urán a usted en La Vuelta?
Bueno, ya sabemos cómo es ‘Rigo’ (risas), con él la experiencia es muy buena porque te hace saber a su estilo que te tiene fe.

Colombia y su ciclismo viven un momento paradójico: se destacan los corredores en el World Tour, pero es el país con más casos de dopaje, ¿qué mensaje dejarle a los que apenas empiezan?
El camino para llegar al ciclismo europeo es de esfuerzo y dedicación. Nosotros, que corremos allá, nos sometemos a 9-10 exámenes antidopaje en todo el año. Estamos muy controlados. El mensaje es que sepan que el camino del dopaje no los lleva a ningún lado. Cada caso de dopaje es doloroso para los que quieren llegar a Europa.

¿Le dolió la disolución del Team Manzana Postobón, equipo donde corrió y se formó?
Claro que sí. Un equipo es una familia y allí estuve tres años. Es un ejemplo para que los jóvenes evitemos esos errores, porque se pagan ciclísticamente. Alguien que se dopa no es una mala persona, ni es un asesino, es diferente de lo personal. En lo profesional es un error que marca el fin de la carrera deportiva. 

Además del ciclismo, ¿a qué le gusta dedicarse?
No he pensado. Mi sueño era ser médico, pero ya no se va a dar porque la medicina se tiene que estudiar desde joven.
Al final de mi carrera puedo dedicarme a ser entrenador, director. Estar con los chicos apoyándolos.

Ahora que no está en la bicicleta, ¿qué le gusta hacer?
Estar en casa, tranquilo, porque es algo que no puedo hacer en la temporada, pues estoy viajando todo el tiempo. Aprovecho para salir a cenar con mis papás, ir a cine con mi novia o a comer un helado. Son cosas que no puedo hacer en temporada.
También aprovecho para comer comida colombiana, sobre todo bandeja paisa (risas).

¿Entonces abandonó la dieta?
(Risas) Sí, pero también hay que moderarse. Si me como la bandeja paisa, ya en la noche como poco, porque entre más me suba de peso, más difícil será volver.

En detalle

  • Sergio Higuita también practicó natación y disfruta de salir a trotar y caminar.
  • Su voto para el deportista del año sería para Egan Bernal, campeón del Tour de Francia, por su juventud y el trabajo duro para ese objetivo.
  • Su próxima temporada iniciará en el Tour Colombia. Después será el turno de la París - Niza. Su gran objetivo será el Tour y los Juegos Olímpicos, si es convocado.